BUENOS AIRES. El Gobierno nacional rechazó el petitorio de las fuerzas de seguridad que protestan desde hace una semana y habló de “desquicio administrativo” provocando la furia de los uniformados que consensuaron profundizar los reclamos y las acciones.El jefe de Gabinete y el ministro de Economía, Hernán Lorenzino, brindaron una conferencia de prensa donde reconocieron “un desquicio administrativo” en la Gendarmería y en la Prefectura, al cual se buscó darle una solución con el decreto presidencial 1.307 que derivó en las protestas. Además anunciaron que no pagarán el salario mínimo de 7 mil pesos que solicitaron los efectivos en un petitorio.“Es imposible. En ninguna área del sector público se pagan básicos de esa naturaleza e incluso dudo que eso ocurra en el sector privado”, señaló el jefe de Gabinete.Además, Abal Medina adelantó que denunciaron ante la Justicia una asociación ilícita entre “estudios de abogados y algunos juzgados puntuales que a través de medidas cautelares de dudosa naturaleza” beneficiaron a ciertos efectivos otorgándoles salarios muy altos. Abal Medina aseguró que el decreto 1.307 garantiza el pago de salarios, con la mayoría de sus componentes remunerativos, y garantizó que el próximo mes ningún efectivo verá reducido su sueldo. El jefe de ministros aseguró que la mayoría de los efectivos verá “mejorada su situación” salarial, “no sólo por aumentos”, sino también porque las cifras serán remunerativas.“El 70% del personal de Gendarmería y el 60% de Prefectura tenían sus haberes judicializados”, aseguró al señalar que buena parte de los montos que percibían estaban compuestos por suplementos que no eran remunerativos ni bonificables. Lorenzino, por su parte, dio precisiones sobre las acusaciones que hizo Abal Medina y aseguró: “Tenemos los elementos que nos van a permitir avanzar en la aplicación del decreto y terminar este desquicio administrativo que tiene una lógica de connivencia de algunos abogados, jueces y elementos de las fuerzas”. El ministro de Economía expuso sobre las condiciones que, en la década de 1990, dieron lugar a que la composición salarial de esas fuerzas esté atravesada por una serie de descuentos y suplementos que provocaron ese “descalabro”. “Los que venían de los 90 crearon el caldo de cultivo para que un grupo de estudios jurídicos vinculados a las fuerzas -integrado por ex miembros y miembros activos de la fuerza- practicaran una industria del juicio”, dijo, y aseveró que “la masa salarial estaba cautelarizada”. “Se nos han reído en la cara”De su lado, Gendarmería y Prefectura rechazaron la propuesta salarial. Raúl Mazza, vocero de los gendarmes en protesta habló desde la puerta del edificio Centinela y criticó el plan presentado: “Se nos han reído en la cara”.Confirmó luego que “la medida no se levanta y hemos llamado a nuestros camaradas a levantar el 50% de los puestos. Los puestos no se van a descuidar”.Consultado sobre las declaraciones de Abal Medina y Lorenzino, el vocero indicó: “Queremos dialogar. No nos pueden decir que el mínimo va a ser de 2.696 pesos. ¿Usted llega a fin de mes con esa plata? Nosotros aceptamos un montón de cosas, somos gente que va y da la vida por la sociedad, pero no nos pueden marginar así”, se quejó. Aclaró que en ningún momento desobedecieron la cadena de mando y criticó que el secretario de Seguridad (Berni), haya firmado el petitorio la semana pasada y no haya participado de nuevas negociaciones. “Estoy dolido. ¿Saben lo que es ver a las mujeres al borde del infarto? Me duele que nos manoseen de esta manera”, indicó. En Chubut, policías tomaron oficinas de la JefaturaUnos cuarenta agentes de la Policía de Chubut tomaron ayer oficinas de la Jefatura de la fuerza de seguridad, a las que ingresaron con sus hijos y bidones con solvente, tras lo cual el Gobierno advirtió que se trata de “un delito grave” y no de una protesta.Los policías autoconvocados se instalaron desde la mañana en el departamento de Finanzas de la jefatura policial en la ciudad de Rawson, para reclamar que se liquide sin descuentos los salarios a los uniformados que participaron de las medidas de fuerza que hace dos meses paralizaron las comisarías de la provincia (ver Policías de Chubut siguen de paro y gobierno advirtió que aplicara sanciones, 21/08/12).El secretario de Seguridad y Justicia de Chubut, José Glinski, reclamó a los manifestantes que depongan su actitud porque, indicó, “esto ya no es una medida de protesta, sino la comisión de un delito grave”.“Hemos abierto en más de una oportunidad y con distintos actores los canales de diálogo”, remarcó Glinski.Respecto de la toma, dijo que “la situación muestra clara evidencia de que no se busca aquí la solución del conflicto sino la extensión del mismo”. El funcionario aseguró que desde el Estado provincial “tenemos la cautela necesaria para poder obrar de la mejor manera posible”.Sin embargo, aclaró que se está a la espera de “las actuaciones del Poder Judicial que van a determinar cómo actuar”.Los efectivos tomaron las oficinas ubicadas en calle Moreno al 500.Dante Rocha, referente del Sindicato Policial de Chubut (SiPolCh) en formación, confirmó que en el interior del sitio había “chicos y algunos tachos de solvente y botellas de alcohol que fueron exhibidas desde las ventanas”.El dirigente aclaró que los policías que tomaron el área de Finanzas de la fuerza no estaban armados. Claves• Los gendarmes y prefectos esperaban ayer a la tarde la respuesta del Gobierno nacional para destrabar el conflicto, que se originó por la aplicación de un decreto presidencial que ocasionó reducciones en los haberes de los uniformados.• A pesar de las sanciones que recibieron algunos uniformados, la protesta por recortes salariales y en reclamo del blanqueo de sus sueldos lleva una semana.• El jueves último, los manifestantes entregaron un petitorio al secretario de Seguridad, Sergio Berni, quien había prometido responder ayer a los planteos.• El gendarme Raúl Maza, uno de los voceros de los suboficiales que desde el martes último reclaman un sueldo básico neto de 7 mil pesos, y quien fue pasado a disponibilidad el sábado, aseguró que aguardan una reunión prevista con funcionarios del Ministerio de Seguridad de la Nación, que conduce Nilda Garr&
;eacute;.• La semana pasada, gendarmes y prefectos entregaron a Berni un petitorio en el que exigieron que no haya sanciones para los manifestantes, un sueldo básico de siete mil pesos y la anulación del decreto presidencial 1307/12 -que estipuló rebajas salariales a los efectivos-.• “Nosotros habíamos tenido un compromiso verbal del director nacional y del viceministro Berni y está el petitorio firmado” por el mismo funcionario, destacó Maza, uno de los que recibió el pase a disponibilidad por haber encabezado el reclamo.





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