“Es un desafío muy grande para nosotros, que apostamos al desarrollo genético”, indicó Gabriel Montiel. El operativo se concretó en San José y estuvo a cargo del médico veterinario Javier Confalonieri.
Con el objetivo del mejoramiento genético, se llevó adelante la primera inseminación artificial en ovejas en la provincia de Misiones. De esta manera, y mediante la posibilidad de congelar semen de reproductores de alto valor genético, se abre una nueva etapa de desarrollo que apunta hacia el impulso de una cuenca ovina de élite en la región.
Fue la primera vez que se desarrolla un proceso de inseminación laparoscópica en la provincia con ovinos. Es un desafío muy grande para nosotros como productores que apostamos al desarrollo genético de nuestra actividad. Estas cosas despiertan otras, es el inicio de las tareas que estamos impulsando para mejorar fuertemente la genética que tenemos en Misiones, expresó el empresario Gabriel Montiel, fundador y propietario de la cabaña ovina La Armonía a PRIMERA EDICIÓN.
La experiencia tuvo lugar el pasado fin de semana en la mencionada cabaña, ubicada en la localidad de San José, donde el médico veterinario Javier Confalonieri del Instituto de Investigaciones Biotecnológicas – Instituto Tecnológico Chascomús (IIB-INTECH) realizó el servicio en una majada de pedigree de la raza Hampshire Down, también llamadas cara negra.
En una comunicación con este Diario, el especialista explicó que la experiencia consistió en una inseminación artificial con semen congelado en nitrógeno líquido por vía laparoscópica, un método que se aplica para que sea eficiente el uso del esperma congelado y así lograr un porcentaje de preñez adecuado.
En este caso, detalló que se utilizó el esperma de un ejemplar que se encuentra en Santa Fe, se trata del macho que logró el 2º premio en la Expo Rural de Palermo, y que fue criado en conjunto por cabañas La Armonía (San José) y Unelen (Venado Tuerto).
Estos métodos se utilizan para mejorar la genética del rodeo, para tener mejores animales y aumentar el valor económico de estos. Esos son los fundamentos básicos por los cuales se utilizan estas técnicas. Es algo que no se ha hecho nunca en Misiones donde se está desarrollando una cuenca ovina y tratar de mejorarlo es fundamental, porque hay mucho entrecruzamiento en la zona, sostuvo el experto.
Características
El porcentaje promedio de preñez a través de la utilización de este método de inseminación artificial varía entre un 30 a 50%. Hay que tener en cuenta que de forma natural un carnero tiene un porcentaje de preñez del 60%. Pero de manera artificial las ovejas son sincronizadas e inseminadas todas en un mismo día y horario. En un día de trabajo tenemos el 50% de las ovejas preñadas, cosa que un carnero lo haría de manera natural a lo largo de dos o tres meses de servicios, aseveró.
Destacó que otras de las ventajas están ligadas a la posibilidad de elegir las características reproductivas y buscar un macho acorde a los objetivos que se quieran lograr, o a las carencias que pueda tener la majada.
También, resaltó que estos métodos tienen muchos beneficios económicos, porque te permiten evitar riesgos innecesarios.
Se trabaja con grupos de élite así se pueden mejorar genéticamente los carneros con los ejemplares de lugares lejanos sin tener que trasladarlos a otras provincias por ejemplo, y exponerlo a otras condiciones climáticas o posibles enfermedades, sostuvo Confalonieri.
A pesar de todas estas ventajas, el especialista señaló que estas técnicas no son ampliamente utilizadas ya que generalmente solo se trabaja con ejemplares de élite. No hay mucha gente que lo haga. No está tan difundido, pero es una técnica que ahora tiene un impulso más importante en ovejas y cabras. Aunque se está desarrollando mucho más, debido al crecimiento de otras razas en la Argentina que se están extendiendo en otras partes del país y en consecuencia se está buscando mejorar la genética de los carneros, afirmó Confalonieri.
Posibilidades
Asimismo, el médico veterinario señaló que en los laboratorios del IIB-INTECH están trabajando fuertemente en la congelación de pajuelas de semen de carneros, y reveló que muchas de estas muestras serán enviadas incluso a otros países como Colombia.
Argentina no tiene la enfermedad llamada scrapie, que es el equivalente a la vaca loca, y eso nos da la ventaja de poder llevar nuestra genética a muchos lugares del mundo, donde otros no pueden entrar, sentenció Confalonieri.
A todo esto, el especialista consideró que para que estos métodos sean aprovechados hace falta difusión. Son técnicas viables que dan buenos resultados, sin embargo están faltando políticas para la difusión, opinó.
En este sentido, apuntó que la ganadería ovina es una gran posibilidad para que la gente se arraigue nuevamente en el campo. La oveja es más competitiva y más rentable que la soja, pero hace falta que la gente entienda que un cordero no solamente sirve para comerse entero y asado, hay que darles valor agregado, apreció. Para lograrlo, consideró, se necesita trabajar para difundir un poco la cultura alimenticia de este animal y cambiar la forma de consumir estas carnes.
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