En diálogo con PRIMERA EDICIÓN, la mujer contó que se separó hace dos años pero “él me sigue atacando y no va a parar hasta matarme”. En reiteradas oportunidades radicó denuncias e incluso, el hombre tiene una prohibición de acercamiento “pero él nunca respetó y nosotros vivimos con terror, toda mi familia está aterrada”.En una ocasión “me rompió el brazo, tengo cinco operaciones. También roció la cama con alcohol y amenazó con quemarnos. Es un infierno mi vida, a veces me enojo y quiero que las autoridades vivan un día conmigo para que conozcan mi infierno”, contó indignada.El último ataque se registró el sábado 31, Andrea despedía el año junto a su familia cuando “él pasó por mi casa y tiró un cascotazo. Reventó el vidrio y me golpeó en la cara”, manifestó indignada.





Discussion about this post