Si se es de los que engordan sin saber por qué, puede que el nuevo estudio realizado por la Universidad de Birminghan (en el Reino Unido) ayude a quitar esos «kilitos» de más que tanto molestan. Concretamente, los datos desvelados por este centro de investigación determinaron que existen tres comportamientos que hacen que, aunque se esté ingiriendo alimentos, la sensación de saciedad no se vea satisfecha: comer mientras se camina, realiza cualquier actividad sentado o hablar con alguien.Curiosamente, este estudio se sumó (y corroboró) otro elaborado por la Universidad de Surrey que, hace algunas semanas, determinó que comer mientras se camina (algo que se realiza habitualmente en las ciudades para llegar a tiempo al trabajo) no provoca sensación de saciedad.Como solución, los expertos aconsejan sacar tiempo para sentarse a la mesa. Algo que cada vez se hace menos pero que es básico para lograr no ingerir más alimentos de lo debido.Fuente: ABC España




Discussion about this post