BUENOS AIRES (NA). La venta de autos de lujo quedó en terapia intensiva tras el golpe que le dio el Gobierno con un impuesto del 35% y el cepo al dólar, por lo que Mercedes Benz comercializará este año diez veces menos de su potencial.Joaquim Meier, que desde noviembre de 2013 está al frente de la marca en la Argentina, lideró el lanzamiento de un nuevo sedan en el país y fue muy crítico hacia las políticas comerciales impuestas por el kirchnerismo.Con expectativas moderadas de venta, Meier puso a la venta la nueva generación del mediano de lujo Clase C, del cual sólo llegará a la Argentina en la versión tope de gama C250 Avantgarde Automático, en unos 135 mil dólares.Se trata de un naftero de 1.991 centímetros cúbicos; cuatro cilindros; 211 caballos de fuerza; con una velocidad máxima de 250 kilómetros por hora y una aceleración de 0 a 100 en 6,6 segundos; con un consumo de entre 5,3 y 5,8 litros cada cien kilómetros.El nuevo modelo se produce en cuatro plantas situadas en Bremen (Alemania), East London (Sudáfrica), Pekín (China) y, por primera vez, también Tuscaloosa (Alabama/Estados Unidos).El directivo de la marca alemana vaticinó que se venderán entre 200 y 300 unidades de la novedad, cuando en un año “normal” podrían ubicarse entre 2.000 y 3.000.El administrador de empresas alemán de 51 años, definió el desafío que enfrentará quien reemplace a Axel Kicillof el 10 de diciembre próximo: “No quisiera ser el próximo ministro de Economía”, dijo, al sostener que ese cargo será como una “silla eléctrica”.
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