SANTA FE (Agencias-Medios Digitales). A poco de que se conociera que unos 245 mil votos correspondientes a las primarias celebradas el domingo no habían sido escrutados, fuerzas de la oposición santafesina pusieron el grito en el cielo y apuntaron al socialismo con variadas denuncias. “Fraude”, “zafarrancho”, “manipulación” fueron algunos de los calificativos que usaron para el caso. Es que en rigor, el número podría alterar el resultado de los comicios, en los que el PRO se erigió en el partido más votado.Ayer el kirchnerismo local, liderado por su candidato a gobernador, Omar Perotti, y su compañero de fórmula Alejandro Ramos, adelantó que hará una presentación para denunciar “fraude electoral”. Pero para el Ejecutivo local, una acusación de esa naturaleza no sólo es errada sino que “le hace mucho daño al sistema electoral” de la provincia.“Lo que se ha llevado hasta ahora es el escrutinio provisorio apenas terminada la votación, donde siempre hay contingencias del tipo de que un telegrama electoral no ha podido ser emitido o debidamente comunicado; o que ha tenido un error o alguna cuestión por la cual las autoridades electorales lo observan, o porque son ilegibles”, explicó el ministro de Justicia santafesino, Juan Lewis, en declaraciones a radio La Red.El funcionario admitió que la cantidad de sufragios sin contabilizar pueden alterar los resultados finales de los comicios, que tuvieron un final ajustado. “En una elección con tantas listas por categoría, con candidatos que a lo mejor vienen cabeza a cabeza en muchas fuerzas, evidentemente los números que aparezcan van a hacer variar la decisión final”.“Fue el escrutinio provisorio, que no es el instrumento legal para determinar quiénes van a conformar las listas que van a participar de las elecciones generales”, añadió.Críticas del PROEl concejal rosarino y primer candidato a diputado provincial de Unión PRO Federal, Roy López Molina, acusó al gobernador socialista Antonio Bonfatti de justificar “los errores groseros” cometidos en el escrutinio provisorio.“Resulta inconcebible que a esta altura el gobernador Antonio Bonfatti no se haya transformado en el garante de la transparencia del proceso electoral y se siga justificando con argumentos mediáticos los groseros errores cometidos en el transcurso del escrutinio provisorio”, afirmó López Molina a DyN.También expresó el edil que “haber contabilizado como escrutadas más de 800 mesas que no tenían telegrama o cuyo telegrama era ilegible es de un amateurismo que pone en peligro la credibilidad de todo el proceso electoral”.En este marco, López Molina recordó que “nuestros apoderados lo advirtieron la semana pasada: no era claro el proceso de carga, no estaba delimitada la presencia de los fiscales informáticos de las fuerzas políticas y el simulacro de escrutinio dejó muchas dudas, por eso lo dijimos antes de la elección”.“Pasaron cosas muy raras” El precandidato a gobernador por el radicalismo Mario Barletta denunció que el escrutinio de las primarias en Santa Fe fue “un zafarrancho” donde “pasaron cosas muy raras”.“Han hecho un zafarrancho. Si fuera gobernador ya hubiera pedido dos renuncias por lo menos. No podés decir que está el cien por cien de los resultados y al día siguiente decir que faltan 800 mesas”, enfatizó Barletta.En declaraciones a Radio 2 y LT10, el titular del radicalismo santafesino advirtió: “No se puede decir que con la seguridad está todo bien cuando no está todo bien”.Por otra parte, advirtió: “Tenemos que preguntarnos por qué la sociedad no nos brindó el apoyo que algunos pensaban que deberíamos haber tenido”. “En varias oportunidades, señalamos que había temas a corregir. La gente no soporta los relatos que no tienen que ver con la realidad. Ante esta situación, se pagan las consecuencias”, subrayó.





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