LEANDRO N. ALEM. Industriales y productores no lograron acordar el valor del Burley misionero, a pesar de que la producción bajó sus pretensiones y pidió un 24% de aumento (al inicio era el 35%), que la industria también calificó “imposible”.El nuevo intento por fijar el precio del tabaco se frustró debido la fuerte insistencia de la industria en los problemas del “mercado”, donde se observa una fuerte caída del consumo y la baja considerable de su uso en los cigarrillos.Si bien el sector productivo admitió los inconvenientes, que pudieron comprobar en su visita de la semana pasada a Brasil, expuso la necesidad de un aumento, atenta a la suba en los costos de producción.Donde sí hubo coincidencia fue en la necesidad de controles en la frontera, ante la posibilidad de que ingrese tabaco verde desde Brasil. Se plantearon distintas opciones a los efectos de efectuar severos controles para evitar el contrabando y el consiguiente perjuicio para el Fondo Especial del Tabaco (FET).Luego de más de tres horas de deliberaciones, representantes de la industria y de la producción decidieron pasar a un cuarto intermedio sin fecha, aunque es posible que vuelvan a encontrarse el jueves.Cabe destacar que los acopiadores le pidieron al Gobierno provincial que habilite las bocas de acopio y se siga analizando el nuevo valor. Este pedido viene a propósito de la pérdida de calidad del producto que ya se colgó en los galpones.
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