POSADAS. Las frases que brindó el gobernador de la provincia en la conferencia de prensa en la Casa de Gobierno ayer (viernes) por la mañana, no eran más que de aliento y reflejaban poca preocupación frente a la situación que vive la provincia por estas horas.Pero los números que brindó en la misma, lejos estaban de esa situación controlada que intentó pintar: más de trescientas familias en una treintena de municipios pasaron el Año Nuevo sin techo, o sin luz, o en ambas situaciones debido al temporal que azotó a Misiones ni bien comenzado este 2015. Sin embargo, Closs indicó que “han sido entre cinco y seis días de mucha lluvia en toda la provincia. Esa cantidad de tormentas, lejos está de ser algo inusitado para Misiones. Desde que El Niño existe, golpea con mucha violencia y tormenta que no se pueden predecir adónde van a pegar con fuerza. Esto se forma y sucede que en un barrio puede haber voladuras de techos y árboles y en el barrio de al lado no pasó nada. Pero no hay ninguna situación de extrema gravedad”. No obstante, el panorama se vuelve extremo cuando las voces de varios de los intendentes se unen para decir que lo que está pasando en sus municipios “es un desastre” y que, sin ayuda por parte del Estado, son los mismos vecinos que salen a las calles para socorrer a la gente que necesita. Además, no se puede decir que “no hay ninguna situación de extrema gravedad” cuando son cuatro las personas fallecidas a causa del temporal con Carlos Velovato, de 21 años de edad, quien el pasado jueves, alrededor de las 18, ingresó al arroyo Yabotí, ubicado sobre la ruta provincial 27 en San Pedro y desapareció de la superficie. Su cuerpo fue encontrado a unos 5 kilómetros aguas abajo del lugar donde desapareció.Según estableció la Policía, el joven se encontraba con un grupo de personas en el puente del arroyo, cuando al arrojarse al agua, habría sido arrastrado por la corriente. La búsqueda del joven hasta el momento no tuvo resultados positivos.El mandatario dijo que “estos temporales no son graves” y para afirmarlo, los comparó con las inundaciones del río Uruguay en el mes de junio o el tornado que sufrió la localidad de San Antonio, a inicios de noviembre pasado. “Si no hubiese existido esta tormenta, no hubiesen fallecido estas personas”, señaló el gobernador.Por su parte, Jorge Franco, ministro de Gobierno resaltó que “todas las contingencias están resueltas porque la mayoría de los casos son afectaciones puntuales en distintos municipios y barrios. Hay casas con voladuras de techos, en su mayoría parciales y la crecida de los arroyos que han afectado a las familias que viven a su vera. Además, tenemos los problemas con las rutas que han sido inhabilitadas de manera preventiva y ya están volviendo a funcionar”. La situación en el río UruguayLos funcionarios se encargaron de aclarar que no hay inundaciones en el río Uruguay, algo cierto. De igual manera, varias de las ciudades como Alba Posse y San Javier, han cerrado el paso a Brasil debido a que el agua comienza a alcanzar límites peligrosos. “Sí hubo un crecimiento lento del río, por lo cual nosotros pedimos a los intendentes que evacuen a la gente que puede estar en riesgo para evitar peligros mayores”, recalcó Franco. Lo cierto es que Misiones comenzó el 2015 con temporales que afectaron a cientos de sus habitantes. Pese al intento de los funcionarios por minimizarlo.





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