BUENOS AIRES. El Festival Barenboim, que se desarrollará hasta el próximo martes 12, quedó inaugurado ayer, por la Orquesta West-Eastern Divan, que interpretó piezas de Maurice Ravel y la pianista Martha Argerich que recreó el “Concierto para piano y orquesta No. 1 en Do mayor, Op15”.Así, a lo largo de diez días, Barenboim se presentará en diferentes formatos, y ofrecerá conciertos donde convivirán el humor de Les Luthiers, el virtuosismo de la pianista Martha Argerich y, por tercera vez en Argentina, la Orquesta West – Eastern Divan que Barenboim fundó junto al filosofo y teórico musical palestino Edward Said y que está integrada por músicos israelitas y árabes.Sobre el conflicto de medio oriente que atraviesa la formación de su Orquesta West-Eastern Divan, Barenboim expresó que Israel “está en una situación en la que uno no se puede sentir bien y para mí, personalmente, es algo absolutamente inaceptable”.Junto a Barenboim se encontraba Miriam Said, viuda del filósofo y critico literario palestino, quien señaló que el mensaje de la Orquesta, “es el humanismo en que mi marido creía y el que hace a la resistencia misma. Este mensaje nos permite tener la fuerza posible para combatir las grandes injusticias que están sucediendo”.Por su parte, Barenboim señaló que “dejando de lado la moral y pensando en la estrategia, todas las guerras un día terminan, ya sea bien, mal, con o sin compromiso pero con más de mil muertos en Gaza, la mayoría civiles y más del 50 por ciento niños, el odio que se está distribuyendo a gente tan joven, a chicos, no lo va a poder parar ningún proceso de negociación política y se impide la creación de un futuro mejor”.“La West-Eastern Divan Orquesta está en una situación de enorme sensibilidad con la guerra. Hay parientes de músicos de ambas partes que se están matando y a pesar de esa guerra tan cruel y espantosa no hay un músico ni árabe ni israelí que haya anulado su participación”, explicó.




Discussion about this post