OBERÁ. El 13 de junio de 2014, la Diócesis de Oberá cumplió sus primeros cinco años desde que el papa Benedicto XVI la creara. En la misa de este último fin de semana se realizó el recordatorio y balance de este primer lustro de trabajo. El actual obispo, Damián Santiago Bitar, hizo un balance y dijo que “todavía somos la Diócesis más pequeña de la Argentina, porque después de crearse la de Oberá el Papa por el momento no volvió a crear otra. Sabemos que es una de las pocas diócesis recién creadas que vivió algo ciertamente inesperado, ya que a los nueve meses falleció el primer obispo, monseñor Víctor Arenhardt, por eso digo que en estos cinco años vivió dos etapas: la primera con el padre obispo Víctor, unos meses venía el arzobispo de Corrientes a cubrir como pudo y yo voy camino a cumplir cuatro años”, sintetizó.Para Bitar, según reconoció, “fueron años muy intensos, muy lindos y muy movidos”. Es que la curia local cuenta con muy poco personal, pero se multiplican esfuerzos para cumplir con todo. El Obispo aprovechó para pedir oración por la paz en el mundo, en Siria y en la Franja de Gaza, y remarcó que “la paz se construye artesanalmente todo los días desde el seno familiar”.“La Diócesis tiene alrededor de nueve mil kilómetros cuadrados en los que hay 18 parroquias y 342 capillas. Si bien yo vivo en Oberá, soy el obispo de toda la Diócesis, por eso digo que donde haya una pequeña capilla en la colonia, allí para mí está la catedral, es decir, que donde voy yo, va la catedral. Ya tuve la dicha de celebrar misa en 205 capillas, además de las que celebro en sede parroquial, esto me permitió ir conociendo a esta gran familia que a la vez necesita, como dice Jesús, muchos pastores, porque los sacerdotes somos relativamente pocos y contamos con la invalorable ayuda de los diáconos, de muchas religiosas y un pequeño grupo de seminaristas que se preparan para ser futuros sacerdotes”. “Indudablemente, la vida de la Diócesis depende del compromiso que cada bautizado asume en el lugar en el que le toque estar, por eso hay parroquias y capillas con mucha vida y movimiento, y otras que necesitan ser revitalizadas. El balance en general es bello y rico, porque uno se da cuenta de que es sólo un instrumento y el que conduce la barca de la Iglesia es Jesús resucitado”, remarcó Bitar.ReseñaEl 12 de junio de 2009, el papa Benedicto XVI creó la Diócesis de Oberá, con territorios desmembrados de las Diócesis de Posadas y de Puerto Iguazú. Además, nombró a Víctor Selvino Arenhardt como primer obispo de esa nueva circunscripción eclesiástica.El 15 de agosto de 2009, Arenhardt recibió los atributos por parte de monseñor Adriano Bernardin, representante del Nuncio Apostólico en Argentina, en una ceremonia realizada en el Parque de las Naciones y a la cual acudieron más de 6.000 personas. En la noche del 17 de mayo de 2010, Arenhardt falleció en un accidente de tránsito sobre la ruta nacional 12, en cercanías de la localidad de Caraguatay. Junto a él viajaba el sacerdote Hugo Staciuk, canciller de la curia diocesana, quien también murió en el acto. Los restos de ambos sacerdotes fueron velados en la Catedral San Antonio de Padua, lugar donde fue sepultado luego Arenhardt. En tanto, el presbítero Staciuk fue enterrado en el cementerio de Oberá. El 4 de diciembre de 2010 fue puesto en funciones como nuevo obispo Damián Santiago Bitar.




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