PUERTO IGUAZÚ. Los vecinos de esta localidad están recibiendo agua del servicio de red turbia, imposible de consumir. La crecida de los ríos ensució las cañerías del servicio de agua potable.El agua marrón se debe la creciente del río Iguazú que bajó mucha sedimentación. Pero las bombas que extraen el agua cuentan con un triturador que destruyen ramas, piedras y todo aquello que pretenda ingresar a las bombas”, había explicado el vocero de la delegación de Imas, Roberto Pereyra.La creciente había llegado a los dos metros de la oficina de máquinas y según ellos mismos contaron, estuvieron muy cerca de tomar la decisión de evacuar todos los equipos.El agua turbia sale por la canilla de cada hogar, aunque no sería la primera vez, ya que las quejas de los vecinos son constantes en ese sentido.Desde el Instituto Misionero de Agua y Saneamiento indicaron que duplicaron la dosis de químicos para tratar el líquido, con clarificación y sulfato.Además, señalaron que con la nueva planta de tratamiento, la cual estaría cerca de inaugurarse, ayudaría al trabajo de la antigua planta para evitar la acumulación de suciedad en las cañerías.En tanto que el punto de extracción en el arroyo Mbocai, aportará 250 metros cúbicos más a la planta potabilizadora de la avenida Victoria Aguirre.Los vecinos cansados de anuncios, reclaman por el servicio, aunque son tan solo nueve mil son los que abonan por el servicio, serían más de 25 mil los usuarios de la ciudad conectados a la red.Pereyra afirmó que “el agua se puede tomar porque es de buena calidad y está tratada”.Quienes pueden comprar agua mineral lo hacen y cada vez son más hogares los que cuentan con dispenser caliente y frío. Un presupuesto más que se suma a los gastos necesarios. Hay a quienes no les queda otra que beber de esa agua que aseguran es de calidad.




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