SANTIAGO, Chile (Agencias). El presidente de Chile, Sebastián Piñera, anunció el cierre del penal Cordillera, donde están los principales represores de la dictadura de Augusto Pinochet condenados por graves violaciones a los derechos humanos, tras denuncias de que gozaban de privilegios.El mandatario tomó esta decisión después de que en una entrevista televisiva, Manuel Contreras, exjefe de la DINA (policía política del régimen militar), evidenciara los privilegios de que gozaban los diez reclusos albergados en ese establecimiento penitenciario.“El Gobierno, tomando en consideración los principios de igualdad ante la ley; seguridad de los internos; y eficiente funcionamiento de Gendarmería (guardia de prisiones), ha tomado la decisión de cerrar el centro penitenciario Cordillera”, señaló Piñera en el Palacio de La Moneda, sede del Ejecutivo.Los privilegios del penal Cordillera, confirmados en una posterior inspección la fiscal María Loreto Gutiérrez, provocaron un gran malestar social en momentos en que Chile conmemoraba el 40 aniversario del golpe de Estado que el 11 de septiembre de 1973 derrocó al presidente Salvador Allende.La situación de los reos militares contrasta con la del resto de la población penal chilena, de 53.000 reclusos, con una tasa de hacinamiento que supera el 70%.
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