BUENOS AIRES (NA). El empresario Lázaro Báez recusó a la jueza de instrucción María Gabriela Lanz, quien lo investiga en una causa por presunta “extorsión” por la transferencia de la financiera CSI, involucrada en la investigación por lavado de dinero.Fuentes judiciales informaron que la defensa de Báez recusó a la jueza Lanz por su presunta “falta de imparcialidad” por haber filtrado la información a la prensa de su expediente cuando el mismo se encuentra bajo “secreto de sumario”.La presentación se produjo luego de que trascendiera en los medios que la jueza Lanz había citado a indagatoria a Báez por pedido del fiscal José María Campagnoli.Además, la defensa de Báez acusó a la magistrada de llevar adelante un proceso “incorrecto e improcedente” en la investigación paralela.En la recusación, los abogados Gabriel Gandolfo y Nicolás Guzmán, defensores de Báez, pidieron que la causa por extorsión sea sometida nuevamente a sorteo para que la Cámara del Crimen designe a otro magistrado.“Ante varias insistencias se nos manifestó en el juzgado que se había ordenado el secreto de sumario en el expediente por lo que resulta llamativo que nos enteremos del avance de la causa por los medios de comunicación. Esto indica una filtración manifiestamente ilegal de información”, sostuvo el abogado Guzmán.Y completó: “La medida solicitada se sostiene ante la afectación de la garantía constitucional del juez que podría ser parcial en estas actuaciones, en perjuicio del asistido y por las ilícitas filtraciones de información del expediente a los medios de comunicación y esto podría ir en desmedro de la imagen de nuestro asistido”.Además, los defensores cuestionaron la intervención del fiscal Campagnoli, quien imputó a Báez por presuntamente haber ejercido presiones al financista Federico Elaskar para que se desprendiera de la financiera SCI, conocida como “la Rosadita”.La titular del juzgado de instrucción citó a indagatoria a Báez, a quien consideró coautor del delito de extorsión en contra de Elaskar, en base a la denuncia del fiscal, y también convocó al ex contador de Báez, Daniel Pérez Gadín, quien le habría advertido a Elaskar que si no vendía la financiera SGI iba a “terminar como (Sebastián) Forza”, uno de los asesinados en el Triple Crimen de General Rodríguez.





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