POSADAS. En busca de soluciones y ayuda, llegaron a Casa de Gobierno ayer representantes de las familias que fueron desalojadas hace más de una semana de los parajes Puente Alto y La Colorada (San Pedro). Parte de ellas están viviendo a la vera de la ruta provincial 17 y el resto en casas de vecinos y parientes que les dieron cobijo en este mal momento. En Casa Gobierno los recibieron el jefe de Gabinete, Ricardo Escobar, y el subsecretario de Tierras y Fiscalización, Jaime Ledesma, entre otros. Mientras que algunos de los productores presentes fueron Eliseo Sequeira, Omar Alvez y Alberto Paudel. También participó el intendente de San Pedro, Miguel Angel Dos Santos.Según contaron a PRIMERA EDICIÓN los productores, “no nos dieron respuestas, nos dijeron que están analizando posibilidades y nosotros les presentamos también una alternativa, el jefe de ministros nos dijo que tal vez el sábado visite el lugar del corte donde estamos mientras encontramos un lugar para vivir”, contó Sequeira. Además, indicó que “propusimos que se nos asignen tierras expropiables cerca de allí, así podemos tener nuestras tierras, pagar por ellas y ser dueños”. Con lágrimas en los ojos, Alberto Paudel, quien hace doce años vivía en Puente Alto y había comprado las mejoras del lugar, contó que “tengo todas las plantaciones anuales allí, donde vivíamos hasta hace poco más de una semana, un galpón con mil chapas de cartón, nosotros ahora estamos en la calle, algunos compañeros están en las casas de los vecinos, en galpones”. “Tengo cuatro hijos, los cuatro estudian, la mayor está en tercer año, tiene 16, el segundo tiene 12, está en séptimo grado, la otra nena que está en tercero y el más chiquito tiene 6 y está en primer grado. Estamos quedándonos en casa ajena, hay días que van a la escuela y hay días que no, a veces tenemos ropa limpia y a veces no, dependemos de la buena voluntad de las familias que nos están ayudando”, añadió. Hombres y mujeres de trabajo expresaron su preocupación y desesperación por esta situación que aún no pueden solucionar. Están en una meseta, donde el futuro es incierto y no hay repuestas por ningún lado. Paudel contó que salió con su familia para hacer la compra de mercaderías el domingo 7 de abril como lo hacían habitualmente, “cuando regresamos la Policía ya no nos dejó entrar, ni siquiera pudimos sacar nuestra ropa, nada. Yo no sé cómo está mi producción, mis animales y nuestras pertenencias, estamos en la calle. Lo que me parte el alma es que no sé qué responderle a mi hijo de seis años que me dice que quiere ir a casa y dormir en su habitación”, contó muy dolido. Por su parte, Sequeira indicó que seguirán en la ruta hasta que tengan una repuesta, “somos gente de trabajo, no pedimos planes, nosotros habíamos comprado estas mejoras para trabajar, queremos trabajar”, dijo. Anticipó que desde hoy el corte de la ruta 17 será total.
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