POSADAS. Desesperada por la situación que le toca vivir, Marcela Blanco, en compañía de uno de sus dos hijos, llegó hasta PRIMERA EDICIÓN para difundir la problemática que vive desde hace poco más de dos meses, cuando le empezaron a descontar los haberes que percibe de su pensión de viuda, según afirma, por el pago de una heladera que le prometieron a través de una empresa y que nunca le entregaron. “Pasaron por mi barrio, casa por casa, con unos folletos -que exhibe-y me ofrecieron la posibilidad de acceder a diversos electrodomésticos y justo estaba necesitando una heladera, la vendedora me dijo que la cuota sería de unos 300 pesos, que debía darle todos mis datos y que ellos iban a verificar en las oficinas, pero me hizo firmar unos cuantos papeles”, comenzó explicando Blanco, quien vive en Piedras Blancas, un humilde barrio de Garupá. Siguió relatando que “quedé esperando la heladera, pero nunca me la llevaron, entonces me fui por el local de la empresa (ubicada en Junín y Salta) y me dijeron que mis papeles no estaban allí, que no figuraba. Entonces hablé con el empleado que me atendió y me preguntó cuánto ganaba. Como no tenía ningún recibo, me propuso ir hasta el cajero automático, para ver si realmente tenía cuenta, que cobraba la pensión a través del banco Nación. Fuimos y dudaba en digitar todo frente a este señor. Ingresé a mi cuenta y le mostré que cobraba así, entonces él empezó a tocar y me dijo que estaba bien, que con ese ticket iba a ver si me podían hacer todos los papeles”.Inmediatamente agregó que “me pidió (el empleado del comercio) que después que cobrara vuelva por el local y efectivamente me descontaron 382 pesos. Entonces fui a la Anses para ver a qué se debía el descuento, ellos me derivaron al Banco Nación, para saber donde fue a parar mi plata. Allí, en el banco, me sacaron un listado y saltaba que era esta empresa que me había ofrecido la heladera la que me estaba descontando. Fui nerviosa, le dije al señor que me atendió en el comercio que me estaban descontando pero que no me habían dado la heladera, no supieron qué decirme y entonces le pedí que me den de baja, porque yo así no quería saber más nada, porque me estaban mintiendo. Ahí me propuso hacer un papel para que firme y así ya no tendría más nada que ver. Bueno, le dije, firmé ese papel que me hicieron, pedí al banco que me cambien la tarjeta porque el señor ese que me atendió sabía mi clave y todo. Ahora no sé qué puede llegar a pasar, si esto sigue así o no”.Ante Defensa del ConsumidorMarcela Blanco, temiendo que esto continúe, y por sugerencia de algunos vecinos, se dirigió a Defensa del Consumidor para radicar la denuncia. “Allí me dijeron que haga una carta por escrito, con la denuncia al Banco Nación, porque me están descontando por algo que no tengo. Hice eso, entregué el escrito y ayer tuve una audiencia con el abogado del banco, al que le conté todo lo que había pasado y que me seguían descontando. Pero ellos dicen que no tienen nada que ver con esto, sino que el problema es con la empresa. Incluso me prometió el abogado darme un papel en el que consta que ellos no son los que me descuentan y que me va a seguir sucediendo”, indicó Blanco.“Hoy (ayer) cobré mi sueldo y me volvieron a descontar. A esta altura es un problema que parece que no tiene fin. Estoy yendo de un lado al otro y tengo gastos de movilidad, pero nadie me soluciona como debe ser, se aprovechan de uno”, resaltó.





Discussion about this post