SAN ANTONIO. Consumidores y comerciantes de la Zona Norte de la provincia dejaron al descubierto la situación que viven en el sector luego de “la bajada de línea de Nación” al congelar los precios en los supermercados hasta abril, si es que en los próximos días la Secretaría de Comercio Interior no prorroga el plazo.Durante los últimos días PRIMERA EDICIÓN recorrió los comercios de esta localidad norteña y dialogó con clientes y trabajadores del sector para conocer su opinión. Por un lado los consumidores manifiestan sufrir un constante aumento de las mercaderías, viendo como cotidianamente hay modificaciones y cada vez les rinde menos el dinero. Y por otro lado, los comerciantes advierten sobre la imposibilidad de este pretendido “congelamiento”.“Los proveedores ya traen las mercaderías con fuertes incrementos. Se han reducido en muchos casos nuestros márgenes de ganancias para conservar a los clientes y si no aumentamos muchas veces, no podemos ni reponer la mercadería”, expresaron algunos consultados por este matutino.Miguel Silva Dico, presidente de la Cámara de Comercio de San Antonio, afirmó que “es imposible mantener los precios como pretende la Nación, los márgenes de ganancia ya se han venido reduciendo, las cargas impositivas son muy fuertes y si dejamos los precios fijos ni siquiera vamos a poder reponer la mercadería”, sostuvo a este medio.“Durante los primeros meses de este año las mercaderías en general han sufrido un incremento de entre el 5 y 10%, pero la harina y sus derivados, como fideos, galletitas, panificados, etcétera, han alcanzado subas de hasta un 25% o más”, ejemplificó Silva Dico. “Hay una merma importante en la venta, es decir, la gente compra menos, busca alternativas, como segundas marcas u ofertas puntuales y se ve claramente que sólo compra lo imprescindible, tratando de hacer rendir cada centavo”, agregó.El presidente de la Cámara de Comercio de esta localidad también se refirió a la escasez que se registra en el sector de algunas mercaderías puntuales, como por ejemplo el aceite, que ya no sorprende en este país. “Se ha complicado un poco el abastecimiento de aceite, de hecho para proveernos debemos comprar un pack de productos que tienen muy poca salida y los faltantes se dan en aquellos productos importados, como champú, desodorantes, todo lo referente a perfumería y también enlatados, como el atún y la caballa”.Una ecuación que no cierraLos costos fijos aumentan, los servicios aumentan, los productos aumentan y mientras tanto los ingresos disminuyen, las ventas también y los márgenes de ganancias se han estrechado hasta el mínimo. El movimiento comercial de las localidades del interior se ha visto muy disminuido durante el último trimestre y en el caso particular de San Antonio, si no fuera por la venta a los vecinos brasileros muchos comercios ya hubiesen bajado sus cortinas, y así lo plasmaron los mismos propietarios de los locales.





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