Este martes se cumple un aniversario más de aquel 4 de noviembre de 1995 en que el primer ministro israelí Isaac Rabin era asesinado a balazos por la espalda por un extremista judío, contrario a los acuerdos que el país había alcanzado con el líder palestino Yasser Arafat y por los que ambos estadistas habían sido galardonados con el Premio Nobel de la Paz apenas un año antes.
Nacido el 1 de marzo de 1922 en Jerusalén, de pequeño Rabin vivió de cerca la masacre contra los judíos conocida como la “Matanza de Hebrón”. Como activista político en sus años de universidad se encaminó en el movimiento sionista que promovía la instauración de un estado judío.
Tras la implementación del Estado de Israel en 1948 participó de las guerras de liberación contra las naciones que se unieron para atacar a su país. Fue ministro de Defensa de Ben Gurión, Embajador en los Estados Unidos, primer ministro entre 1974 y 1977, y nuevamente accedió a ese cargo en 1992, pero fue asesinado en pleno ejercicio de su segundo mandato, cuando tenía 73 años.
Militar con amplia experiencia en la lucha contra los estados árabes, estaba dispuesto a asumir riesgos igualmente grandes en aras de lograr una paz justa y duradera en Oriente Medio.
En 1994, Rabin recibió el Premio Nobel de la Paz junto con el líder de la Organización por la Liberación de Palestina (OLP), Yasser Arafat, y el ministro de Asuntos Exteriores israelí, Shimon Peres, por la firma de los Acuerdos de Oslo, considerados un paso potencialmente crucial hacia la resolución del conflicto árabe-israelí, comenzando con la retirada parcial de Israel de los territorios ocupados y la creación de una Autoridad Palestina.
El asesinato del primer ministro tuvo lugar al finalizar una manifestación por la paz en Tel Aviv en apoyo a los Acuerdos de Oslo. Su muerte se produjo por tres disparos efectuados por un nacionalista israelí de derecha que se oponía a los Acuerdos.
Cientos de miles de personas asistieron a una ceremonia en la plaza donde Rabin fue asesinado. Su funeral se celebró el 6 de noviembre en presencia de líderes de 80 países, desde Estados Unidos hasta Jordania.









