Con la llegada de septiembre y el inicio de la primavera, los cuadros respiratorios y las alergias estacionales comienzan a cobrar protagonismo en Misiones. Las consultas médicas se incrementan y el sistema de salud refuerza la atención, sobre todo en el área pediátrica. En este marco, el doctor Guillermo Rolón, coordinador del Programa de Infecciones Respiratorias Agudas Bajas (IRAB), brindó un panorama de la situación en la provincia y advirtió sobre la persistencia de casos en la zona norte y noreste. Pero el fenómeno no se limita a la población pediátrica. Según el doctor Guillermo Rolón, cada vez más adultos también están desarrollando síntomas por primera vez.
“Estamos viendo casos en padres y abuelos que acompañan a los niños. Personas que nunca habían presentado síntomas ahora tienen rinitis, irritación conjuntival, sequedad en la boca o disfonías. Creo que hay algo a nivel ambiental, quizá vinculado al cambio climático, que provoca esta reacción del aparato respiratorio”, explicó.
En diálogo con la FM 89.3 Santa María de las Misiones, el galeno explicó además que la curva de casos de IRAB ha sido “quebrada”, con subidas y bajadas abruptas a lo largo del año y señaló que desde la semana 24 (junio) comenzaron a registrarse picos de casos con subidas y bajadas abruptas, lo que describió como una “línea quebrada”.
“En la semana 24 llegamos a 260 casos; en la semana 29, que fue el pico mayor, alcanzamos 323 niños atendidos en el Hospital de Pediatría. Luego, los valores bajaron a 260, 230 y en la semana 34 registramos 233. Si bien hay un descenso, no es tan marcado, porque la curva sigue quebrada”, indicó Rolón.
Agregó que en las últimas tres semanas se observó un descenso en la zona sur de la provincia, aunque preocupa el norte y noreste, particularmente localidades como Bernardo de Irigoyen, Andresito y El Soberbio. “Ellos mantenían 10 o 12 casos y pasaron a duplicarse a 18 o 20. Son pocos, pero para esos lugares representan bastante”, advirtió.
El pico más alto en vacaciones de invierno
El médico recordó que, a mediados de julio, se produjo el aumento más fuerte de la temporada en Posadas. “Pasamos de 190 a 380 casos semanales en la semana 29, justo en la segunda semana de vacaciones de invierno. Pensábamos que iba a ser menos porque había menos concurrencia en las escuelas, pero fue el pico mayor hasta ahora en la provincia”, explicó.
Sobre el impacto en internaciones, señaló que Eldorado es el hospital que concentra la atención pediátrica desde Puerto Rico en adelante y que en junio se registró el mayor nivel de ocupación en esa región. “Desde ahí en adelante, aunque los casos aumentaron, no superaron los años anteriores. En la semana 29 no llegó ni siquiera al 25 o 30% de ocupación de camas, cuando en otros años alcanzaba hasta el 70%”, destacó.
Alergias y broncoespasmos
Rolón precisó que el programa IRAB contabiliza fundamentalmente el área pediátrica, pero que los cuadros de broncoespasmos y síndrome bronquial obstructivo se incrementan durante todo el año.
“Antes trabajábamos de abril a septiembre, pero desde hace cinco años lo hacemos de forma anual porque los casos se presentan constantemente. No medimos el grado de alergia, pero sí la frecuencia de broncoespasmos, que están ligados tanto a alergias como a cuadros virales infecciosos”, dijo.
Consultado sobre la incidencia en adultos, el especialista admitió que también en personas mayores aparecen síntomas alérgicos. Estamos viendo casos en padres y abuelos que acompañan a los niños. Personas que nunca habían presentado síntomas ahora tienen rinitis, irritación ocular, sequedad en la boca o disfonías. Creo que hay algo ambiental, quizá vinculado al cambio climático, que provoca esta reacción del aparato respiratorio. El organismo responde produciendo más moco como defensa: por eso aparecen la tos, la secreción y la sensación de picazón o ardor”, sostuvo.
Recomendaciones para prevenir los síntomas
Respecto a las medidas de prevención, el coordinador del IRAB subrayó la importancia de la detección precoz y de los cuidados básicos. “Ya sea una alergia o un cuadro infeccioso con síndrome obstructivo, el peligro es que progrese y cause hipoxemia, es decir, baja de oxígeno. Por eso reforzamos la capacitación en manejo de secreción, posición semisentada y aspiración”, indicó.
Al mismo tiempo, recalcó que la higiene de manos, la limpieza adecuada de utensilios y la ventilación de ambientes son medidas clave. “Las personas que ya saben que son alérgicas deben consultar con su médico. Existen muchos antialérgicos, aerosoles y medicamentos, pero lo fundamental es el cuidado ambiental. No hay que sacudir ni barrer porque eso levanta polvillo; lo mejor es limpiar con un trapo húmedo y evitar la acumulación de partículas en el aire, tanto en el hogar como en las escuelas o el trabajo”, recomendó.




