Con la llegada del buen tiempo, el cuidado de la piel frente al sol vuelve a ocupar un lugar central. Este mes, una nueva edición de la campaña nacional de prevención y detección del cáncer de piel recorrerá el país con un equipo de seis médicos, entre ellos, por primera vez, una dermatóloga de Misiones, quienes ofrecerán chequeos gratuitos en distintas localidades. Más allá de la jornada anual, los especialistas insisten en la importancia de la educación como herramienta clave para desmentir mitos y evitar caer en la desinformación que circula en redes sociales.
En diálogo con FM 89.3 Santa María de las Misiones el médico dermatólogo Gastón Galimberti, especialista en dermatología quirúrgica y cáncer de piel, adelantó que “estamos a una semana de la campaña y tenemos muchas ganas”. Destacó que la iniciativa no solo abarca prevención y detección, sino que desde el año pasado incorporaron intervenciones quirúrgicas para pacientes indicados, que se realizan en un hospital en Alem.
Galimberti recordó que durante la pandemia la campaña se interrumpió, pero con el tiempo lograron reorganizarse y consolidar una propuesta aún más completa: “Antes, los pacientes quedaban a la espera de una derivación. Ahora estamos contentos porque podemos realizar tratamientos en el momento”, lo que mejora mucho el acceso y la adherencia al cuidado.
La campaña se desarrollará del 15 al 19 de septiembre en la sede de LALCEC en Alem, y está abierta a toda la provincia -incluso recibirá pacientes que llegan desde Brasil y Corrientes-. Además de consultas y cirugías, incluirá actividades educativas en una escuela rural, donde se trabajará con niños sobre la importancia de la ropa adecuada, el uso de sombreros y otros hábitos de protección solar.
Mitos y verdades
En los últimos meses, una polémica en redes sociales puso en duda la necesidad de usar protector solar, argumentando que “el cuerpo se protege solo”. Ante esto, Galimberti fue claro: “Hay mucha desinformación. La protección frente al sol es indiscutible, pero debe basarse en la educación, no en el miedo.”
El especialista propone un enfoque de “fotoeducación, no fotoprohibición”, ya que hay personas que llegan a desarrollar fobia al sol y limitan sus actividades al extremo, lo cual no es saludable, lo ideal es aprender a voncicir con el sol de forma inteligente.
En cuanto a las diferencias entr los tipos de radiación, detalló que “la radiación ultravioleta A (UVA) penetra más y es la principal causante del envejecimiento cutáneo, arrugas y manchas; la ultravioleta B (UVB), que tiene más energía, produce quemaduras y altera el ADN, siendo un factor crucial en el desarrollo de cáncer de piel” y subrayó que en zonas como Misiones, con alta radiación, “la protección es aún más crítica.”
Para medir el riesgo de exposición, recomendó el uso de aplicaciones móviles que indican el índice UV (bajo, moderado o alto). “Cuando el índice es alto, la protección debe ser máxima”, precisó, pero aclaró que la protección no se trata solo de crema: también hay que usar ropa adecuada, sombreros de ala ancha y anteojos con filtro UV, porque la radiación también afecta los ojos.
Respecto al uso del protector solar, Galimberti contestó que el mito del “bloqueador total” no existe: “Hablamos de filtros solares porque filtran parte de la radiación, pero no toda. Por eso, aunque usemos protector, algo de radiación pasa. La clave está en combinarlo con otras medidas: ropa, sombra, horarios”. Recomendó aplicar la cantidad adecuada y reaplicar para lograr el efecto indicado en la etiqueta, pues generalmente se usa menos de la cantidad necesaria.
Finalmente, Galimberti habló sobre los factores de protección solar (FPS), comentó que aunque existan productos con FPS 30, 50 o hasta 100, la diferencia en protección real entre un FPS 30 y 50 no es tan significativa, apenas 1 o 2%. “Recomiendo siempre utilizar el fotoprotector de mayor espectro posible, identificado como ‘broad spectrum’ o de alto espectro”, para garantizar una protección elevada contra diferentes tipos de radiación, enfatizó.








