En tardes frescas, cuando el mate acompaña y el cielo amenaza con lluvia, pocas cosas resultan tan reconfortantes como unas buenas tortas fritas. Sin embargo, no todos quieren resignar el cuidado de la alimentación a la hora de darse un gusto. Para eso, existe una versión más liviana de este clásico argentino, que conserva el sabor de siempre sin necesidad de grasa ni aceite.
Esta alternativa saludable se cocina al horno, no requiere fritura y se elabora con ingredientes simples, accesibles y de bajo contenido calórico. El resultado es una torta crocante por fuera, tierna por dentro y con un perfil nutricional mucho más equilibrado que el de la receta tradicional.

Ingredientes para una merienda sin culpas
Para preparar estas tortas fritas al horno, se necesitan tan solo seis ingredientes. Se puede optar por harina común o integral, lo que permitirá incorporar más fibra a la preparación.
2 tazas de harina (integral o común)
1 cucharadita de sal
1 cucharadita de polvo de hornear
¼ taza de agua tibia
2 cucharadas de yogur natural (también puede usarse leche descremada)
Además, se puede agregar azúcar impalpable al servir, aunque es totalmente opcional.
Paso a paso: del bowl al horno
La preparación no tiene complicaciones. Primero, se mezclan la harina, la sal y el polvo de hornear en un recipiente amplio. Luego, se incorporan el agua tibia y el yogur o la leche, y se amasa hasta lograr una textura suave y homogénea. Si la masa resulta seca, se puede sumar un poco más de agua, de a cucharadas.
Una vez formada la masa, hay que taparla y dejarla reposar unos 15 minutos para que tome consistencia. Después, se divide en bollitos y se estiran para formar discos con un pequeño corte en el centro, tal como se hace en la receta tradicional. Estos se colocan en una placa forrada con papel manteca o una superficie antiadherente.
La cocción se realiza en horno precalentado a 200 grados durante 15 a 20 minutos, hasta que las tortas estén doradas. El aroma que sale del horno anuncia que están listas para disfrutar.
Livianas y sabrosas
Esta versión de tortas fritas rinde aproximadamente ocho unidades, con un aporte calórico estimado entre 65 y 70 kcal por pieza, es decir, menos de la mitad que su par frita. La clave está en el reemplazo de la grasa por yogur o leche descremada y en la cocción sin aceite.






