En el marco de los cierres, despidos y parálisis productiva debido a la fuerte caída del consumo interno y las exportaciones, sumado al ingreso de importaciones, cámaras y asociaciones de la forestoindustria se reunieron el fin de semana pasado en el 147° Congreso Maderero, que tuvo lugar en Virasoro, Corrientes. Allí, además de exposiciones, camaradería entre empresas y nuevas novedades en el sector, 24 de las 28 entidades que integran la Federación Argentina de la Industria Maderera y Afines (FAIMA) elevaron su reclamo a la Nación.
En diálogo con la FM 89.3 Santa María de las Misiones Mercedes Omeñuka, presidente de la FAIMA, dijo que el sector está trabajando a un 70% u 80% de su capacidad, dependiendo la región. En algunos lugares ya hubo despidos y, en otros, reducción del horario laboral para no llegar a esa situación. Sin embargo, de no tener respuestas a los planteos, la crisis y los despidos seguirán profundizándose.
“Tenemos datos de que hay PyMEs que están ya con serios riesgos de tener que parar”, lamentó y dijo que en la zona no hubo despidos por ahora, “lo que tenemos es reducción de horas de trabajo, pero si esto no se revierte en un corto plazo, ese es el camino, sin duda”, advirtió.
Uno de los pedidos más urgentes tiene que ver con el impulso de normas “que habiliten la construcción de obras de infraestructura bajo el esquema de la asociación público-privada, porque entendemos que las obras son esenciales para sostener el crecimiento económico, pero a través de la competitividad logística“, apuntó.
Y sumó que en el NEA “estamos muy lejos de los lugares por donde tienen que salir nuestros productos, tenemos el problema de las rutas y nuestros costos que son elevadísimos”, expuso. En este marco, Omeñuka destacó la operatividad de los puertos de Posadas y el de Ituzaingó, que se pondrá en marcha en breve, pero no alcanza ante la masivas importaciones que llegan.
Preocupación por las importaciones
Entre las conclusiones a las que llegaron se puede mencionar que la estabilidad macroeconómica permite avizorar un horizonte productivo, pero piden respuestas de la Nación ahora:
“Como cadena forestoindustrial reconocemos el avance del Gobierno en la estabilización de las variables macroeconómicas, pero reafirmamos la necesidad de una política industrial a mediano plazo que promueva la producción nacional y que también eso sirva para generar divisas a través de las exportaciones de la forestoindustria, el agregado de valor a través de las exportaciones”, apuntó Omeñuka.
Las entidades coincidieron también en la preocupación por el incremento de las importaciones. “Nosotros vemos con preocupación la eliminación de los reglamentos técnicos y el tipo de cambio apreciado en términos reales”, expuso la titular de FAIMA.
En esta línea, hizo hincapié en las importaciones de bienes finales, por ejemplo, los muebles traídos de Brasil, donde a los socios de la FAIMA les sale más barato comprar el producto terminado en el país vecino antes que producirlo acá, o el ingreso de viviendas de madera de China, que “pone en riesgo también empleos directos e indirectos”, dijo.
Omeñuka advirtió en ese marco que el dólar barato trae aparejadas complicaciones a las economías regionales de frontera como la forestoindustria. “Vemos que con este tipo de cambio, sobre todo acá que tenemos las fronteras tan cerca con Brasil, eso nos complica”.
El Congreso Maderero

Sobre la cita, que tuvo lugar en Virasoro, Corrientes, Omeñuka comentó que se reunieron 24 de las 28 cámaras y asociaciones que integran la FAIMA, durante tres días. “Sin dudas fue un evento que reunió mucha gente, superó un montón nuestras expectativas, generó muchísimo interés y fueron unas jornadas realmente intensas”, confió.
Contó también que “dentro del marco del congreso hemos realizado visitas a empresas: a FRESA, la generadora de energía a partir de biomasa, al aserradero Acon Timber. Después visitamos una plantación forestal donde la empresa Bosques del Plata organizó una demostración de una cosecha forestal con todos los equipamientos que hoy por hoy se están utilizando en la zona”, dijo.
Agregó que arribó mucha gente, de distintos puntos del país, y para ellos “fue atrapante” la cita, ya que “no utilizan la tecnología que tenemos nosotros acá en la zona”, dijo Omeñuka en referencia a Misiones y Corrientes, líderes en la forestoindustria.








