La empresa Electricidad de Misiones SA (Emsa) no sólo le está cobrando a los usuarios el resultado de la caída de los subsidios nacionales a la energía que elevó el costo de la compra de megavatios al por mayor. También le aplicó a sus clientes un incremento del 30% que nunca fue “blanqueado” ante la comunidad, ya que hasta la fecha se defiende de los reclamos por el “tarifazo” culpando exclusivamente al gobierno nacional por el alevoso incremento. Esa suba del 30% por encima de lo que resulta de la caída de subsidios, de por sí dura de asimilar, es la que llevó el costo de la energía en Misiones a niveles casi inverosímiles, con boletas residenciales que superan los mil pesos en promedio, facturas de comercios que rondan los diez mil e industrias que deberán pagar cuentas siderales, y que ya advirtieron que habrá consecuencias graves ante la imposibilidad de sostener mano de obra y de evitar el impacto en el precio final de los productos. La Resolución 22/2016 que puso en vigencia los nuevos cuadros tarifarios para Misiones señala que “se considera oportuno autorizar un incremento del 30% para las categorías de la 1 a la 11; de la 13 a la 15 y de la 16 a la 18”, es decir, a todas tarifas residenciales, comerciales, jubilados, grandes usuarios, consorcios, alumbrado público, servicios de agua y cloacas, hoteles, exceptuando de esta suba a los que consumen menos de 200 Kwh mensuales y a las Cooperativas. Pero apenas un par de renglones más abajo, la misma Resolución dice que “se aclara que todas las categorías establecidas en los cuadros tarifarios que se aprueban en este acto, se verán afectadas por el incremento del costo mayorista que le corresponda en cada caso”, es decir que en un párrafo se refieren al aumento provincial exclusivamente, y en el otro a los nuevos valores de la tarifa sin subsidios nacionales. El documento oficial deja al descubierto otra de las “verdades a medias” de la empresa Emsa, que en un comunicado oficial del 29 de febrero culpó al gobierno de Mauricio Macri por el tarifazo al señalar que “esta situación se produjo como consecuencia del nuevo cuadro tarifario que lamentablemente nos impone el Poder Ejecutivo Nacional a través del Ministerio de Energía y Minería con la sanción de la Resolución Nº 06/2016 de dicha cartera”.Pedido de explicaciones El Defensor del Pueblo de Posadas, Alejandro Cohen, le requirió a Emsa y al Ministerio de Hacienda Obras y Servicios Públicos de la Provincia de Misiones, que expliquen cómo es que si el aumento de tarifas autorizado es del 30%, el cuadro tarifario que se aplica refleja incrementos que ascienden hasta el 308%, “desconociendo el criterio de las variaciones de aumentos y de dichos porcentajes”.Ya antes había enviado una nota requiriéndole al presidente de la distribuidora, Sergio “Pity” Ferreyra, que ordene la devolución de los montos mal facturados, advirtiéndole sobre la ilegalidad de la metodología “pague y después reclame” que impuso tras el tarifazo anticipado sobre los consumos del mes de enero, que todavía estaban subsidiados por la Nación. Esa metodología es “contraria a la Ley de Defensa del Consumidor” y un claro caso de “abuso de posición dominante”, señaló. También, según el funcionario, la empresa deberá devolver lo que le descontó a cada usuario por el cobro indebido del Decreto 2101/12 que venció el 31 de Diciembre de 2015. Se trata de un monto fijo para todos los usuarios del servicio eléctrico de Misiones destinado al “Fondo Provincial de Desarrollo de Infraestructura Eléctrica”. El costo de la ineficienciaA través de las redes sociales, comerciantes de la ciudad de Posadas dieron a conocer una aplicación que permite a los usuarios misioneros comparar cuánto pagan por su consumo en la provincia tras la caída de los subsidios nacionales y cuánto pagarían por el mismo consumo si vivieran en Capital Federal. La comparación así realizada devela que en la categoría residencial, en Misiones se paga -como mínimo- un 40% más que en CABA por igual consumo. Si el costo del Megavatio/hora ahora cuesta lo mismo, la diferencia se genera por costos de administración y déficit por pérdidas, según los especialistas. En otras palabras, lo que se paga de más sería la “ineficiencia”. A modo de ejemplo, para la categoría residencial hasta 1.400 kWh mensuales, el aumento de Emsa supera el 100%, ya que el costo para el consumo superior a los 200 kWh “voló” desde 0,494$/kw a los 0,926$/Kw, mientras que Edenor cobra 0,586 $/kw para la misma franja de consumidores. A partir del uso del simulador, decenas de usuarios realizaron los cálculos que develaron la enorme disparidad. “El simulador me da $759 y la boleta de Emsa me vino por $ 2.099” expresó la usuaria Sissi Fontana. Lo mismo le pasó a Oscar Heilmann, que recibió la factura por $ 644, pero que si vivía en Caba iba a abonar $234 por el mismo consumo. La usuaria Vero Sanabria también utilizó la aplicación, según la cual el consumo del período 02/2016 le iba a costar 340,77 pesos en Caba, pero acá le facturaron 1.190,55 pesos. Llaman a no pagar la boleta El defensor del Pueblo de San Vicente, Alfredo Halberstad, llamó a sus conciudadanos a no pagar la boleta del período 02/2016 durante los próximos 20 días a la espera de las tratativas que inició para que Emsa refacture ese consumo -que midió casi en exclusiva la energía demandada en el mes de enero- según el cuadro tarifario vigente en el primer mes del año, que estaba subsidiado por la Nación y por ende, debió costar más barato. El viernes por la mañana un nutrido grupo de ciudadanos se concentraron frente a las oficinas de Emsa para reclamar por las sobrefacturaciones que sufrieron.Unos ciento cincuenta vecinos acompañaron la movida contra el tarifazo ante el Jefe de Distrito, Claudio Kusuk, a quien le pidieron que explique la indiscriminada suba. Los vecinos se mostraron muy molestos porque en la convocatoria solo estuvo Halberstad, y se notó la ausencia de los concejales e integrantes del ejecutivo municipal.
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