Al profundizar el procedimiento, se logró secuestrar tres redes, un bote de madera y una cámara de vehículo, que suele utilizarse para armar redes.Luego de un amplio recorrido por el área, y con la colaboración de los integrantes del equipo Ñandú de una empresa privada de la zona, se encontraron con personas desconocidas en el momento en que ingresaban en la “faja protectora” del arroyo Yasí, propiedad lindante con el Parque Provincial Puerto Península. Ya en la madrugada del miércoles, los defensores de la flora y fauna misionera ingresaron al monte y dieron con un campamento ocupado por tres cazadores furtivos que, al notar la presencia de los uniformados, se dieron a la fuga, abandonando sus pertenencias. Entre ellas, se secuestró una escopeta calibre 16 mm con siete cartuchos del mismo calibre, un matasolo de fabricación casera calibre 36 mm, cuatro cartuchos calibre 20 mm, un cartucho calibre14 mm, dos hamacas para dormir, tres linternas y dos cuchillos, entre otros elementos que utilizan los furtivos para cometer este tipo de delito ambiental. Se labraron las actas correspondientes para continuar con el expediente.