Horacio Oscar Ferreira, fue arrestado por orden de la justicia de Eldorado, a raíz de una denuncia penal radicada por su novia acusándolo de haberla golpeado.
El secretario de Gobierno de este municipio, Horacio Oscar Ferreira, fue arrestado por orden de la Justicia de Iguazú, a raíz de una denuncia penal radicada por su pareja, por presunta violencia de género. La joven de 23 años, que tenía una relación con el funcionario desde hace unos tres años, presentó la denuncia el domingo al mediodía en Puerto Iguazú.
Allí fueron los dos a pasar el fin de semana y el incidente habría ocurrido a primera hora de ese día. El funcionario, de 47 años, está acusado por presunta violencia física, verbal y psicológica.
Se trata del segundo escándalo que involucra a funcionarios municipales de Montecarlo. El primero ocurrió el 10 de junio pasado, cuando el entonces viceintendente, Jorge Lovato, se negó a realizar un examen de alcoholemia durante un control de tránsito en Eldorado y, además, no contaba con licencia de conducir, según consta en la denuncia de los inspectores. Fue sancionado con una multa equivalente a 26 mil pesos.
Más grave
Rocío Da Luz, que reside en Montecarlo se presentó el domingo 15 de abril al mediodía en la Unidad Regional V de Puerto Iguazú para relatar una supuesta golpiza por parte de Ferreira, con quien aseguró mantiene una relación de noviazgo desde hace tres años.
En el documento policial consta que la joven se encontraba en un paseo de compras con el funcionario el fin de semana último, tras lo cual decidieron pasar la noche en Iguazú. La pareja concurrió a un boliche y tenía planeado pernoctar en un hostel. Fue en este último lugar donde habría comenzado una discusión que terminó en gritos, golpes y amenazas.
Siendo las 6 horas aproximadamente, volvimos al hostel, en eso le escribió una chica a su celular que quería utilizar sus influencias para que la saque de estar detenida, porque tuvo una pelea en un boliche en Montecarlo. Le planteé el porqué tenía que ayudarle, él se enojó y me dio un golpe a mano cerrada en mi rostro, declaró la joven. Da Luz admitió que, luego de recibir el primer puñetazo, le propinó un golpe en el rostro a Ferreira en defensa, a lo que éste respondió más violentamente.
Me apretó del cuello, me empujó contra la pared y continuó golpeándome por todo el cuerpo. La habitación se encontraba bajo llave, él se fue al baño, y cuando salió vio que estaba escribiendo en mi celular un mensaje. Ahí fue cuando me dice que me va a romper el dedo, y me lo tuerce con intensiones de romperme el pulgar derecho, prosiguió Da Luz con su acusación en la Policía.
Continúo golpeándome por el cuerpo, me empuja y en el piso continúa con los golpes diciéndome que no tenía nada que reclamarle. Me apretó el cuello, me golpeó y me empujó nuevamente contra la pared. Cuando me caigo, él cree que me desmayé, entonces agarró su celular y llamó a la policía, describió la mujer.
Le dije (a Ferreira) que lo iba a denunciar y me contestó que no iba a poder hacer nada porque él tiene influencia en la localidad de Montecarlo, me dijo que me iba a matar, apuntó la denunciante. Posteriormente, se trasladó en un patrullero policial hasta la Comisaría de la Mujer donde, luego de hacer la declaración, se retiró en presencia de sus familiares.
Discussion about this post