Alumnos de la Escuela “Tierra Colorada”, dependiente de la Delegación Misiones de la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (UTHGRA), se alzaron con el segundo premio en el Tercer Torneo Nacional de Cocina de la UTHGRA, llevado a cabo en Córdoba a principios de noviembre. El secretario general de UTHGRA Seccional Misiones, Antonio Acosta, comentó que asistieron 24 escuelas y que en esta ocasión “volvimos a salir segundos. Mantuvimos el nivel, lo que significa que la gastronomía misionera anda muy bien. Seguiremos en esta senda y queremos destacarnos en el 2018 en Mar del Plata, que volverá a ser la sede, que vean que Misiones no se aleja de la gastronomía de los grandes centros urbanos. Aquí tenemos mano de obra calificada, y este premio lo queremos compartir con la comunidad”. Recordó que en la primera convocatoria, que se fue en Mar del Plata, solamente Misiones participó desde el Litoral, y obtuvo el octavo puesto. El ganador fue San Luis y, por ente, la provincia anfitriona de la segunda competencia, donde la representación misionera logró el segundo puesto. Andrés Cubilla es instructor de estos alumnos de segundo año de la Escuela Tierra Colorada y también se desempeñó como jurado del Torneo. “Me tocó inspeccionar cómo se desenvolvían los participantes dentro de la cocina. Me di cuenta que la capacidad de los chicos que seleccioné para competir era superior a la de los demás por la manera en que se desenvolvieron”. Con los resultados en mano aseguró que está muy satisfecho “porque se destacaron y trajeron el segundo premio. Para mi es una alegría enorme”. La participante Tatiana Titus contó que cuando entraron a la cocina se encontraron con una caja de diez productos, de los cuales usaron ocho. “Teníamos quinoa por lo que elaboramos un risotto con una crema de choclo, una salsa fría tipo emulsión de espinaca con aceite de oliva y una reducción de vino tinto. Hicimos un crocante de batata y el bife de chorizo grillado. Teníamos dos horas para elaborar la receta y media para escribirla y entregarla al jurado”, confió. A su entender y por las repercusiones que tuvo el trabajo, “estuvimos a un punto de obtener el primer puesto. El jurado valoró el plato porque había armonía entre los sabores, la textura, el color. Era sencillo pero a la vez armonioso. Estábamos tranquilos pero al mismo tiempo emocionados de poder representar a la provincia. Fue una experiencia linda, única, y encontrarnos con chef conocidos. porque no solo competimos con estudiantes sino con profesionales que desde hace muchos años”, acotó. El jurado no se limitó a evaluar el plato sino cada movimiento del grupo dentro de la cocina. “Si limpiábamos, si utilizábamos los elementos adecuados para los procedimientos, el uso de las bachas, el manejo de los tres hornos (dos con vectores y uno común) y las temperaturas, los colores de las tablas para los tipos de alimentos, los cuchillos para cada corte. Además, la presentación personal, la higiene, la forma de presentar el plato. Todo era merecedor de un puntaje, que sumaba a la hora del veredicto”, explicó.Leonardo Makoski ofició de ayudante principal y dijo que “ya teníamos en mente qué era lo que podríamos hacer porque de ante mano hemos trabajado con los productos que nos podrían haber tocado. Podíamos elaborar distintas guarniciones pero elegimos una y empezamos a escribir la receta, y una vez concluida, la elaboramos”.La ayudante Carina Santander ayudó en la elaboración de la receta y luego “salí porque debía ingresar en el momento del emplatado. Desde afuera lo viví con ansiedad y tensión, viendo qué es lo que hacían. Fue una experiencia única, con la satisfacción de representar a Misiones. Me apasiona la cocina. Puedo decir que esto es lo mío. Es una carrera que decidí estudiar pero que me gusta desde chica”.Fotos: O.Ibarra
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