Señora Directora: Quisiera expresar mi más enérgico repudio a la cobarde agresión, por parte de un alumno, que recibió el preceptor Almeida de la Escuela de Comercio de Posadas. Es lamentable y preocupante como estos hechos se repiten muy a menudo.Me pregunto: ¿las autoridades educativas se acercaron al Sr. Almeida al menos para darle un abrazo de contención? ¿La ministra de Educación lo hizo? ¿O están todos muy concentrados en la campaña política como para ocuparse de un trabajador lesionado? Me parece que la falta de respeto, la inclusión de los alumnos violentos a como dé lugar, es un terrible drama que a diario los docentes debemos padecerlo. Nuestras autoridades educativas dan la orden de tenerlos en la escuela, total ellos no deben recibir los golpes ni los insultos permanentes. Después estos trabajadores de la educación, cuando no dan más y piden licencia, por esta situación, el Consejo de Educación se los niega, ponen infinitas trabas burocráticas y hasta maltrato verbal por parte de las Juntas de médicos que se creen dioses. Para algunos salen rápido las licencias; para otros, como dije, trabas burocráticas que hacen que los docentes se enfermen más todavía. Después piden calidad educativa.En estas condiciones donde, repito, la indisciplina, la agresión y la falta de respeto hacia los docentes es una constante… ¿y nuestras autoridades donde están? Ahora bien, ¿cuándo van a elaborar un reglamento unificado para toda la provincia? No se puede seguir tolerando esta situación, es vergonzoso lo que los docentes a diario deben soportar. En ningún país se tolera a estos violentos; acá es el único donde todo se toma a la ligera.Me pregunto si el compañero Almeida se hubiese golpeado la cabeza en el suelo y la lesión hubiese sido más grave, ¿a ver quién se hace cargo?Nuestras autoridades educativas, la verdad, dejan mucho que desear, dan lástima y vergüenza.
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