Mucho se ha estudiado sobre el sentimiento de culpa, pero lo que aquí vamos a hablar es sobre este sentimiento psicológico o la experiencia que deriva del paradigma del miedo, que nos provoca inevitablemente malestar y nos zambulle en vicios autodestructivos comunes del ser humano de hoy. El sentimiento de culpa se instaura desde la infancia cuando aprendemos que algo está mal y hacer lo contrario nos saca de las reglas establecidas por una sociedad, religión, institución, familia, etc. y esta es una experiencia que puede volverse compulsiva si no la entendemos y la modificamos a tiempo. La que a su vez también es muy usada para manipular personas y obtener beneficios de otros.La culpa una vez instaurada merodea todos los aspectos de nuestras vidas, porque no solamente podemos sentirnos culpable por alguna acción sino que a su vez se tiende a echar culpas de todo lo que ocurre por el fenómeno espejo con el que vivimos: veo en frente lo que tengo en mí. Y así se vuelve un círculo vicioso donde la toma de acción para encontrar una solución se vuelve difícil ya que nadie resuelve algo hasta que no se sienta responsable de ello.La contracara de la culpa es la responsabilidad, hacerme responsable de lo que este en cuestión y al hacerme responsable puedo tomar decisiones sobre ello. Cuando me hago cargo y soy responsable de lo que me sucede empiezo a ver posibilidades y despegarme de las reglas que en cierta forma no se alinean al bienestar que necesitamos o buscamos. Así por ejemplo, si quiero separarme de mi pareja pero me siento culpable porque lo que “debería” es seguir intentando porque así lo hicieron mis padres y abuelos, lo que hacemos es seguir encerrados en decisiones que no tomamos y lo que a la larga daña nuestra integridad y autoestima (ya hemos hablado sobre decisiones en notas anteriores).Si decido dar fin a una situación, empiezo a crear mis propias reglas dando lugar a mi dignidad y valía. Lo que el otro sienta en cuanto a lo que decidimos es asunto del otro, que tendrá que manejar a su manera y bajo su responsabilidad que hacer con lo que siente, y en función a eso tomar sus propias decisiones.Si me siento culpable es porque dejo que algo externo domine mis elecciones internas, y si culpo a alguien es porque no me hago responsable en elegir que quiero y deseo esperando y haciendo responsables a otros por las elecciones tomadas en nuestro lugar para nosotros.Culpa vs ResponsabilidadEliminamos la culpa al hacernos responsables, pero de qué somos responsables es bueno tener bien en claro. Mi responsabilidad es cuidar:• Mis palabras• Mis conductas• Mis acciones• Mis ideas• Mis errores• Mis decisiones• Mi esfuerzo• Y las consecuencias de todas estas mencionadas.ColaboraNatalia de las NievesTerapeuta MotivacionalEn Facebook: RincónDe Luz y Bienestar3764-4366593
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