Sin escrúpulos y con un “aparato aceitado” hasta en la política, el Grupo Z le sigue tomando el pelo a los pasajeros del servicio integrado del transporte metropolitano. Por un lado, convenció a las autoridades comunales de posponer la apertura de la demorada (cuatro años ya) estación de Transferencia de avenida Quaranta en Posadas, con la excusa de obras que hay que realizar y calles que arreglar para que pasen los colectivos articulados.Por el otro, <a href="http://www.primeraedicion.com.ar/nota/253802/rotundo-rechazo-de-encarnacenos-a-la-posible-llegada-del-grupo-z-al-.html">mediante las nuevas tecnologías de la información y las redes sociales, trascendió el interés del monopolio por quedarse con parte del negocio del transporte público en la vecina Encarnación (Paraguay).</a> ¡Pobres los usuarios encarnacenos si llega el Grupo Z a quedarse con la concesión!Como muchos ya conocen lo que es viajar con los Z, incluso mediante el tren internacional, lanzaron una campaña por Facebook y WhatsApp a fin de requerir a las autoridades paraguayas que se licite el servicio con empresas de ese país, con tal de evitar al Grupo monopólico.Tan mal, como dicen en cuanta entrevista tienen con los medios afines, no les va. No dejan de invertir afuera (recientemente con el Grupo Plaza de Buenos Aires, uno de los más grandes del país) pero sí de cumplir con decenas de cuestiones que se necesitan para prestar un mejor servicio en Posadas, Garupá y Candelaria. Desde refudios para esperar el colectivo (ni hablar de las “inteligentes” que iban a avisar cuánto faltaba para la llegada del servicio); mayores frecuencias en barrios alejados; coches mejor equipados para no viajar como ganado; entre algunos de los más requeridos.Sabiendo que nadie les pone un límite en Misiones, teniendo como amigo al ministro de Transporte macrista de la Nación que no llamó a licitación para el servicio ferroviario entre Posadas-Encarnación otorgado por el gobierno K; el Grupo Z avanza en sus negocios como un verdadero pulpo.Sin embargo, no todo esta tan perdido en el Estado. Un juez Federal se animó a procesar a una parte de los Z, que es investigada por la entrega de subsidios que no le corresponderían. En Misiones, donde son intocables, siguen haciendo lo que quieren, cuando quieren. Y tienen muchos años más por delante para seguir recaudando. El que sufre, es el usuario del transporte.
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