Los sistemas de producción de hoy traen facilidades, medios de subsistencia y confort más eficientes y de mejor calidad para millones de seres humanos, pero al mismo tiempo, están agotando recursos naturales importantes y contaminando ecosistemas, además de conglomerados humanos.En este contexto sería interesante proyectar un sistema más inteligente que sea capaz de desarrollar innovaciones para crear ciclos de producción regenerativos inaugurando, de ese modo, un nuevo modelo de desarrollo en el que los residuos sean nutrientes y los productos generen también efectos positivos para personas y para la naturaleza.Las actividades industriales deberían apuntar al crecimiento de la sociedad nutriendo al ciclo biológico de manera global, a la vez que alimentando el ciclo tecnológico e industrial sin sentirnos culpables de nuestro deseo natural de obtener lucros. A esta postura es lo que Michael Braungart y William McDonough – Cradle to Cradle (Gili, SL Barcelona 2014) llama eco efectividad productiva. La idea de crear, producir y reciclar ilimitadamente está direccionada en contra de muchos procedimientos industriales que hoy desarrolla el ser humano. Los mencionados autores la presentan como el camino para la conservación de nutrientes que faciliten el desarrollo de la vida futura, haciéndolo sustentable, es decir, vivir, crecer y prosperar sin dañar nuestro planeta.La diversidad necesariamente debe ser adoptada como concepto amplio, no se trata sólo de defender especies de su extinción sino también preservar los minerales y recursos naturales en general necesarios para desarrollar la vida en general. Esta preocupación de nuestros días tuvo su origen en la revolución industrial comenzada a fines del siglo XVIII que significó el inicio de los cambios en el mundo que impulsaron el progreso en términos tecnológicos y al mismo tiempo el nacimiento de problemas sociales y ambientales. Este proceso fue surgiendo según la libre iniciativa de la sociedad inglesa de la época en un contexto de pobreza y limitaciones que del algún modo justificó su aparición. Los inventos y la producción de nuevas máquinas y tecnologías resolvieron muchos de los problemas de entonces brindando mejor calidad de vida aparente a las poblaciones. No obstante, la inevitable producción de materiales tóxicos, de basura industrial, de quema masiva de combustibles fósiles, así como los problemas sociales emergentes fueron generando problemas ambientales, que en ese entonces eran imperceptibles, pero que hoy están identificados y estudiados y sobre los cuales pesa la acusación de ser los culpables principales del cambio climático. A partir del siglo XIX comenzaron las primeras observaciones y constataciones sobre los daños al medio ambiente provocados por el proceso de industrialización que nunca se detuvo. Al principio, la visión que se tenía era que la madre tierra era capaz de regenerar de manera continua todo ese daño, pero con el correr del tiempo vinieron cambios drásticos de esa comprensión entendiendo que, tanto los suelos como el aire y el agua son más vulnerables de lo que se pensaba. Ya en nuestros días no sólo el ambiente científico, sino cada uno de nosotros puede constatar dicha vulnerabilidad, exacerbada por el crecimiento brutal de la población mundial y el desarrollo de las principales economías basado en el consumo masivo de bienes y servicios que son las presentes preocupaciones de los científicos ambientales.La actual revolución tecnológica y el ambientalismo no son incompatibles. Las propias Naciones Unidas afirman que se deben fomentar políticas industriales eficientes en términos de uso de los recursos que generen menor consumo de energía, menos contaminación y/o desperdicios usando recursos renovables tanto para los productos fabricados como para su reciclado o biodegradación una vez cumplida su vida útil. Esto último, se debe a que todos los productos tienen componentes que representan riesgos colaterales al momento de su reciclado y esto es un punto central que los mencionados autores abordan sobre la temática ambiental, entendiendo que los productos y sus componentes individualmente, deben ser sustentables todos por igual. Ellos, afirman que el reciclado tiene valor cuando el componente o materia prima acompaña al producto terminado siguiendo el concepto de "producir y reciclar de manera ilimitada". O, en otras palabras, debería poder reciclarse todo el producto de manera integral o también por cada componente en particular.Con algunos pequeños ejemplos que siguen Braugart explica más detalladamente su idea que es ni más ni menos que el concepto de "nada se pierde todo se transforma".Como ejemplos podríamos citar aquel en que los animales y los seres humanos exhalan dióxido de carbono con su respiración, luego las plantas lo toman para su crecimiento y producen oxígeno" o aquel que afirma que el nitrógeno de los residuos es transformado en proteína por micro organismos animales y plantas". O sea, la intención es mostrar cómo los principales nutrientes que contiene la tierra son o pueden ser naturalmente reciclados.La mencionada eco efectividad productiva, se sustenta en algunos pasos que son claves cuando la intención es mitigar los efectos del cambio climático. Para empezar, debería llegarse a la eliminación en los procesos industriales de componentes reconocidos como perjudiciales, tales como algunos fosfatos, metales pesados, cloro, plomo, mercurio y dioxinas, pero al mismo tiempo elaborar listas de materiales sustitutos y componentes que sean los apropiados para la salud humana y animal y/o por lo menos inocuo para la tierra el aire y el agua. Transitoriamente la sociedad actual y principalmente los líderes mundiales están inmersos en problemas serios de corto plazo como son la pobreza, la inseguridad o el terrorismo, lo cual les impide ver con claridad o priorizar la situación ambiental. No obstante, por nuestros hijos y nietos estamos obligados a colocar estos temas en mesas de discusión para esclarecer, trabajar y difundir esta problemática, especialmente porque son las generaciones futuras quienes sufrirán más duramente las consecuencias de nuestros egoísmos o en el mejor de los casos de nuestros errores.
Discussion about this post