Dentro del país los valores más altos se siguen pagando en las provincias del NEA y NOA, donde el último año la brecha con los valores de la región Sur alcanzó al 20%. Según el Instituto para el Estudio sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (Ieral), en el último año los precios de los combustibles subieron con una marcada disparidad regional. El gasoil aumentó en los últimos doce meses en términos nominales, un 7,5% promedio en el país, en tanto en el NEA la variación fue de 15,3% interanual y algo similar ocurrió con las naftas. Si bien las variaciones, y por lo tanto la desigualdad entre regiones, responden en parte a la realidad de un mercado desregulado, la política energética del binomio Macri-Aranguren profundiza las asimetrías. Así lo demuestra un estudio reciente del Observatorio de la Energía, Tecnología e Infraestructura para el Desarrollo (Oetec).El Observatorio estima que en los cinco primeros meses de 2017 las importaciones de petróleo crecieron un 326% respecto al mismo período de 2015 y ya superaron el total de ese año en un 4,8%. Destaca que la política del sector es digitada hoy por “un cartel de empresas con poder ministerial” y muestra que la empresa Axion, propiedad de PAE, principal petrolera privada del país aumentó en 1.024% el total importado.Shell pasó, a su vez, de cero a importar 282.167 metros cúbicos en 2017. El giro importador recae en una cínica transferencia de recursos, ya que las empresas –resalta el estudio- compran el crudo a costos menores a los locales y no los trasladan a pecios.
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