(Nota publicada por PRIMERA EDICIÓN el 9 de julio de 2002) Un ejemplar de Hereford, de 9 meses de edad y aproximadamente 240 kilos de peso, murió afectado por "mancha" en un campo de la segunda sección del departamento de Ituzaingó (Corrientes), según lo determinaron los veterinarios Horacio Angélico y Enrique Ciancanglini, ambos representantes del Senasa local y de Posadas, respectivamente. El misterio volvió a presentarse en un campo argentino, esta vez muy cerca de Posadas, en la estancia El Timbó. El encargado del lugar, Marcelo Alonso, comentó que el sábado por la tarde notaron que "el animal rengueaba, y el domingo temprano uno de los peones me avisó que vio a la vaca muerta en medio del campo, cuando nos acercamos a verla estaba en estas condiciones, mutilada, por lo que decidimos llamar a las autoridades del Senasa".Alonso cubrió con una carpa el cadáver, para evitar que animales carroñeros lo devoren, y esperó a que llegaran representantes del Senasa. Ayer por la tarde una comitiva de profesionales se presentó en el lugar a tratar de develar el misterio.Similar a otros casosEl cadáver de la vaca, a pesar de que ya habían pasado más de 24 horas desde que la encontraron muerta, no presentaba "rigidez cadavérica", lo que llamó la atención de los profesionales, habida cuenta de que pasadas 12 horas a partir del momento de la muerte, los animales ya presentan signos de rigidez. Tampoco presentaba signos de descomposición o putrefacción, a pesar de que estuvo a la intemperie desde el domingo hasta ayer por la tarde, cuando los representantes del Senasa sugirieron cremarlo. Las mutilaciones dejaron a este cadáver sin lengua, hueso hioides, músculos maceteros del malar inferior completo y parte del maxilar superior, faringe, laringe y esófago de la parte superior, ojos, ano y vulva. Lo más llamativo, tanto para los profesionales como para los demás presentes en el lugar, fue que si bien al animal le extrajeron los ojos, las órbitas oculares estaban intactas, sin que existan rastros de desgarro o corte alguno. En el lugar donde hallaron a la vaca no encontraron huellas de ningún roedor, ni rastros que pudieran suponer el ataque de alguna persona o animal, y al igual que en los demás casos que se registraron en el país, aquí tampoco se hallaron huellas de sangre y los cortes realizados en el maxilar y las demás áreas eran cortes netos, sin desgarros, y que estaban prácticamente cicatrizados, sin rastros de sangre.Muerte naturalNo obstante, quedó determinado que la causa de la muerte de este bovino fue una enfermedad conocida como "mancha" y gangrena gaseosa (conclusión a la que arribaron los profesionales luego de la necropsia), enfermedad que suele presentarse en los bovinos. La mancha es una enfermedad bacteriana producida por un clostirideo y que generalmente ataca a animales jóvenes y gordos. Lo cierto es que apareció otra vaca mutilada que se suma a las que se encontraron en diferentes regiones del país en los últimos tiempos. Y también es cierto que por mucho que algunos traten de atribuir las mutilaciones al hocicudo rojizo, son muchos también los que no creen en que un pequeño roedor se lleve siempre las mismas partes de los animales.Además quedan muchos interrogantes sin responder, como por ejemplo a qué se debe la falta de rigidez cadavérica, etcétera.
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