Garupá es una de las ciudades más pobres de la provincia, con una gran cantidad de obras paradas, otras reclamadas, con barrios sin servicios básicos y con un jefe comunal que, cada vez que puede, reclama por la baja coparticipación que recibe de la Provincia en relación a su población actual. Sin embargo, para sorpresa de muchos se conoció que en el presupuesto municipal para este año, el intendente Luis Ripoll tendría 6 millones en gastos reservados. La partida “Bienes y Servicios no personales sin discriminar”, según el argumento del Ejecutivo es dinero que se destina a la “ayuda social”. “980 mil pesos para Emergencias, más de 660 mil en concepto de gastos de movilidad y representación, mientras que $4.300.000 pertenecen a Erogaciones Reservadas”, detalla la partida principal. Con respecto a este último punto, en el artículo 12 de la documental de Presupuesto se expresa que “solamente puede ser retirada por intendente municipal y se rendirá al Tribunal de Cuentas con el recibo de cobro como único comprobante, es decir, sin rendición de cuentas”. No obstante, desde el Concejo aseguraron que ese artículo sufrió una modificación antes de ser aprobada y que ahora el Ejecutivo tendrá que justificar los gastos.Esto fue confirmado por el concejal opositor Emilio Rufahl, quien comentó a PRIMERA EDICIÓN: “Decidimos aplicar más rigurosidad al Ejecutivo. Falta la publicación de ese cambio, pero lo real es que deben haber registros y rendición del intendente”, aseguró.Este Diario pudo conocer que Ripoll comentó a los concejales que ese “dinero es reservado para ayuda social”, “pues hay muchos vecinos con necesidades urgentes”. “En primera instancia no fue aprobado el Presupuesto, ya que solicitamos la modificación del polémico artículo. No obstante, sabemos que el intendente tiene la posibilidad de gobernar con lo presupuestado en el ejercicio anterior”, indicó el edil, quien agregó que Ripoll incluyó “un aumento para los municipales en el presupuesto y con eso apuró a los concejales para la aprobación del ejercicio contable”. El concejal reconoció a PRIMERA EDICIÓN que el presupuesto “fue aprobado por unanimidad”. Sobre el estado actual del Municipio, el concejal fue más crítico con el destino de esa partida: “Si bien no es mucho, se podría haber girado para obras necesarias en la ciudad, como ser arreglo de calles o terminar las construcciones paradas y que servirían para mejorar el bienestar de todos”. El edil detalló que el dinero de la partida es “de recaudación genuina del Municipio, es decir que no se toca el dinero de la coparticipación provincial. Tal vez no sea la forma, pero la suba salarial a los municipales influyó en la decisión de aprobar el presupuesto”.
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