A pesar de que el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación decidió “restablecer” las pensiones a personas discapacitadas “que por error de aplicación de criterio pueden haberse quedado sin cobrar” y agregó que el pago se hará efectivo la próxima semana, sigue la incertidumbre y los reclamos de quienes fueron afectados por la medida de suspender las pensiones no contributivas.En Eldorado, por ejemplo, este viernes por la mañana se realizó una movilización pacífica en la que se convocó a personas cuyas pensiones fueron suspendidas y que efectivamente pudieran comprobar su discapacidad. En un rato se acercaron al menos 20 personas a quienes se le cortó el beneficio. Este número se suma a los 18 que se habían relevado el último miércoles.“Tenemos que mandar un mail con los datos de esta persona. Me dijeron que entre lunes y martes se dará de alta nuevamente”, aseguró a PRIMERA EDICIÓN la titular de Acción Social de la Municipalidad de Eldorado, Norma Torres.La funcionaria indicó que “los que mandamos les garantizamos que son personas con discapacidad. El resto tendrán que venir a hacer ellos un relevamiento”, además opinó que en este tipo de casos “hay que hacer terreno. Enseguida sabes si es realmente discapacitado o no. En caso de duda hay que hacer los estudios, pero resulta que los primeros cortados fueron los que evidentemente eran discapacitados, alguien en silla de ruedas, sin un brazo, sin una pierna, a ellos les cortaron. Entonces para evitar este corte masivo hay que hacer al revés, primero hay que verificar”.HistoriasAlicia Beatriz Chávez tiene 32 años y su diagnóstico es hemiplejía del lado derecho con parálisis cerebral desde su nacimiento. Cobra una pensión desde que tiene ocho años y si bien no se la cortaron, tiene miedo. “Estoy con la preocupación de que me puede tocar y me preocupa bastante porque vivo con mi pensión”, aseguró en diálogo con PRIMERA EDICIÓN.Si bien tiene a su familia para ayudarla, “soy independiente, tengo una casa, vivo sola y sería frustrante que me la quiten porque vivo con eso y me ayuda bastante. Sirve para que uno sea independiente, porque uno como persona quiere tener su independencia y salir adelante solo, al margen de que haya una familia que lo cuide”. Alicia no tiene trabajo fijo, “suelo hacer ventas y ayudo a la gente necesitada”. Conoce a gente que perdió la pensión y “está muy mal y vive día a día. La pensión es poca y es injusto que lo poco que tenemos te lo saquen”.Esta situación se generó debido a que el Ministerio de Desarrollo Social decidió aplicar el decreto 432 de 1997 en el que se establecen mayores exigencias y condiciones para quienes quieran acceder a una pensión. Por ejemplo, aquel dueño de un auto o cuyo cónyuge cobrara una jubilación mínima, quedarían excluidos. Con esa vara, varios quedaron afuera. En ese sentido, la titular de la cartera de Desarrollo Social, Carolina Stanley, dijo que se revisarán los criterios establecidos en dicho decreto.Carlos Bock es de Aristóbulo del Valle, tiene una discapacidad motriz y se desplaza en silla de ruedas. Es otro de los misioneros afectados por la medida. Según contó a PRIMERA EDICIÓN,<a href="http://www.primeraedicion.com.ar/nota/238102/insolito-se-compro-un-auto-y-le-quitaron-la-pension-por-discapacidad.html"> a mediados de 2016 perdió su pensión porque, gracias a una herencia, pudo comprar un Chevrolet Corsa modelo 2015.</a> Cuando fue a cobrar se encontró con su cajero en cero, consultó la razón y el argumento fue “incompatibilidad de patrimonio”. Casi un año después sigue sin recuperar su pensión. “Hoy no tengo un peso en el bolsillo. En estos once meses nunca me había faltado dinero. Gracias a Dios y a los amigos, hermanos y buenos vecinos siempre tuve algo para poner en la mesa de mis hijos. Pero hoy estoy angustiado, no sé cómo llegar a fin de mes”, relató a PRIMERA EDICIÓN.Pese a la marcha atrás del Gobierno nacional, no está del todo claro sobre lo que sucederá en casos como el de Carlos. Por el momento no hay precisiones sobre cuáles pensiones serán restituidas y cuáles no. “Es indignante lo que está pasando a personas con discapacidad como yo. La pensión que cobraba era mínima pero me ayudaba a seguir viviendo. Hoy me siento humillado por no poder a ser valer mis derechos”, cerró Carlos.
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