"Peleamos varios frentes dentro de la guerra de Malvinas, el principal fue la improvisación. La guerra fue una improvisación y nosotros peleamos primero contra el hambre, el clima y la falta de abrigos. No fue solo contra los ingleses". En estos términos se expresó José Luis Rodríguez, un veterano de la Guerra de Malvinas en la “Charla Abierta sobre Malvinas”, organizada por excombatientes y sus hijos junto con la Comisión de Actos y Festejos, la Dirección de Cultura y la Municipalidad de San Vicente que dio inicio a las conmemoraciones del Día del Veterano de Guerra, que es hoy.Participaron del encuentro alumnos de los colegios y escuelas de la ciudad de San Vicente y se realizó en la Casa de la Cultura y el Bicentenario de la Capital Nacional de la Madera. Se expusieron perspectiva histórica, el contexto nacional e internacional que le llevó al gobierno militar de ese entonces encabezado por Leopoldo Fortunato Galtieri a la Guerra de Malvinas en 1982, causas, consecuencias y problemática actual respecto del conflicto bélico. El veterano Rodríguez fue el encargado de la exposición de la situación geopolítica y luego Rogelio Frelich explicó como están hoy la mayoría de los veteranos y en qué situación viven algunos de ellos. De hecho el hombre denuncio ante los presentes la situación que vivió el veterano Teodoro Carballo, hace una semana, cuando fue detenido y golpeado por la fuerza policial. “Teodoro Carballo está pasando muy mal. Necesita ayuda psicológica. Desde que falleció su esposa hace unos años vive muy mal y nosotros no podemos ayudarlo. El 23 de marzo estaba en un bar jugando pool y unos policías del Comando Radioeléctrico de San Vicente entraron al lugar y le detuvieron solo a él, lo golpearon y recién el sábado 25, dos días después de la detención le llevaron a darle atención médica. Este camarada está pasando por una crisis muy profunda y necesita ayuda”, clamó en contacto con este Diario.De su parte, Diego Sazula, otro héroe de Malvinas expuso como fue “el pos Malvinas” para los veteranos y sus familiares.“Mis padres se enteraron que yo estaba en la guerra cuando estaba por volver. No teníamos como avisarle. Yo hice la colimba en Curuzú Cuatiá y nos llevaron sin previo aviso a las Malvinas el 22 de abril de 1982. Fuimos los últimos soldados en bajar. Luchamos como podíamos. Hicimos lo que pudimos, enfrentando a un ejército profesional y con mucha tecnología para aquel tiempo”, relató a su vez, José Luis Rodríguez. También participaron del encuentro los hijos de los Veteranos de Guerra y contaron cómo es la vida de los familiares de un excombatiente y cómo viven ellos las secuelas de la guerra. En este sentido aseguran que “hoy se evidencia mucho más las secuelas físicas en los excombatientes por la edad que tienen. Aunque hay quienes todavía padecen secuelas psicológicas”.
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