La Rueda Interna del Rotary Club Posadas reconoció a Eusebia “Neny” Valdez como la Mujer del Año 2017. Una distinción que las esposas de rotarios entregan en torno al Día de la Mujer y lo hacen en la sociedad para aquella que se ha destacado en algún área. La ceremonia se llevó a cabo en los salones del hotel Julio César donde asistieron los socios rotarios, invitadas que recibieron la misma distinción en años anteriores y la familia de la nueva Mujer del Año. Una de las mujeres miembro de la Rueda Interna, Susana Cerenich de Sauer explicó que ella se la distinguió por una vida dedicada a la solidaridad y destacándose su accionar en la Fundación Tupá Rendá (Hogar de Dios), donde fue gestora y co-fundadora con el padre Barros en 2012.La presidenta actual del Rotary Club Posadas Doris Sánchez de Rodríguez, y miembros de la comision del premio Mujer del Año le hicieron entrega de una placa recordatoria y un hermoso ramo de flores. Entre las mujeres miembros de la Rueda Interna figuran además Alejandra Navarro Frick, Teresita D. de Robaina, Elisa de Monzani y Susana de Poupard, Dialogamos con la protagonista de la noche, quien fue a recibir su reconocimiento con sus hijos y su mamá doña Pomposa y nos dijo que “el que recibió mucho tiene que dar mucho, es cuestión de justicia no es que somos ’buenitos’. Yo nunca voy a poder devolver tanto como recibí: dos hijos hermosos, una familia que me quiso, no hice mérito, me cuidaron, me educaron, me atendieron… y tengo que devolver algo”. Es así su humildad, o es así como ella entiende que hay que trabajar en la vida. Neny dice que ella es “la cara dura, charlatana, pero hay un montón de gente que ayuda no solo yo. Creo que es el milagro del voluntariado, el Señor es el encargado de multiplicar los esfuerzos, por eso digo que me da vergüenza aunque salí con el ego hinchado por las nubes, como un pavo real, pero cualquiera es generoso con saco ajeno y yo no trabajo sola, hay mucha gente que colabora, que trabaja y que ayuda a que los niños reciban algo, un poco, para vivir mejor”. Esta mujer, luchadora y emprendedora es Ingeniera Química, fue profesora y Secretaria Académica. Hace cinco meses está jubilada y más esfuerzo le dedica a la fundación. Su mérito está en que ella solo da sin esperar porque lo tiene todo, es una agradecida e invita a que hagamos lo mismo: “Agradecer por la vida que tenemos porque hay mucha gente que tampoco eligió y no tiene lo mismo que nosotros, los hijos, la familia, la pareja, el trabajo… hay mucha gente no tiene eso y devolver por tanto es ayudar a que otros puedan vivir un poco mejor”. (R.T.)
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