Al transitar por la ruta provincial 105 se vislumbran a lo lejos pequeños montículos de basura pero al acceder a la zona del By Pass, a escasos 500 metros de la arteria que conduce hacia la Zona Sur de Misiones, a medida que los focos se multiplican, se tornan más extensos. Y como si se tratara de una burla las mayores descargas se encuentran delante de los carteles que se colocaron para advertir la prohibición de arrojar residuos en ese lugar que algún día unirá la zona con la avenida Cocomarola.En el escenario no es tarea fácil divisar a los desaprensivos pero los vecinos más próximos, aunque un poco distantes de este nuevo basural a cielo abierto, estiman que arrojan los bultos en horas de la noche, ya que las luces de la zona prácticamente no se encienden. Y condenan una y otra vez tan desagradable actitud. Desde los restos de desechos de todo tipo, orgánicos e inorgánicos, carcazas de cocinas, lavarropas, neumáticos, emanan olores desagradables, que se perciben desde lejos. Como si no fuera suficiente semejante acto, muchos encienden los desechos y la quemazón perdura por días, dejando al olfato y a la vista un panorama verdaderamente desagradable. Hace unos dos años un grupo de ciclistas manifestó sobre ese tramo que “Transitamos con placer por ese sector” pero que “a diario observamos el cambio, que consiste en ver animales autóctonos atropellados, y cada vez mas basura que es arrojada al costado del camino. Ver cómo crecen los montículos de basura de todo tipo golpea a quienes amamos la naturaleza y la disfrutamos. Los residuos son arrojados por señores/as para quienes todos los demás seres no somos nada”.Fotos: Gentileza Blas Martínez
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