Excluidos de la economía formal, trabajadores rurales de Puerto Libertad decidieron organizarse y crear una cooperativa para la producción y venta de bienes naturales, regionales y de calidad. Tiene como nombre “Cooperativa Parajes Unidos”, su desarrollo comenzó a fines del año pasado y ya está en proceso la formación de la personería jurídica. En la organización, trabajan en conjunto los parajes San Isidro Labrador y Nueva Libertad. Son 40 familia, que en conjunto decidieron paliar la crisis con el trabajo y la solidaridad. El ingeniero agrónomo, Juan Daddario -uno de los coordinadores de la cooperativa- dijo a PRIMERA EDICIÓN que el proyecto “nació mediante un movimiento nacional que se llama Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE). Son trabajadores de diferentes ramas, que nosotros llamamos trabajos de economía popular, o sea productores, o familias de trabajadores, que están excluidos de la economía formal -no tienen un trabajo en blanco, no tienen beneficio de una obra social, aportes jubilatorios- y no solo son compañeros que el sistema no los contiene, sino que también, tienen que salir a buscar y generar su trabajo, para poder comer. Dentro de esa categoría, es donde entra la agricultura familiar, como ese trabajo no registrado, y único medio de vida”. Indicó Daddario: “Acá, la necesidad de la gente, de la zona rural de Libertad, es organizarse con la producción, para tener más fuerzas entre los colonos y buscar alguna alternativa en la comercialización y elaboración de sus productos”. El ingeniero explicó que el objetivo de la cooperativa es lograr “una comercialización en conjunto y mayores puntos de ventas. Eso aún está en proceso, ya que la cooperativa es muy reciente. Hoy el principal problema que tienen -por los colonos de la región- es que no logran vender el total de ventas de su producción. Entonces, la idea es poder aceitar los canales de comercialización y que, también, se logre hacer productos más elaborados”. En las feriasSe explayó el ingeniero: “Algunos compañeros venden sus cosas en ferias francas, porque hace rato están produciendo. Los productos principales son los tradicionales de la chacra, el maíz, la mandioca, zapallo, porotos. Hay elaborados, como el almidón, harina de maíz. Después otros compañeros producen verduras como lechuga, rúcula, frutas en almíbar, dulces, escabeches, pollo. Y los principales puntos de ventas en este momento son la feria franca de Libertad y la feria de Iguazú”. “A pesar de no estar constituidos formalmente, ya estamos trabajando, haciendo muchas capacitaciones sobre cómo trabajar de forma cooperativista, algo que requiere organización, para que el resultado sea aumentar la producción”.Dijo Daddario, durante la charla con este Diario, que las capacitaciones las dan en conjunto entre los especialistas y los colonos. “Nosotros formamos parte de una organización que se llama Patria Grande. Los miembros de esta organización, algunos, son técnicos y otros ingenieros agrónomos e ingenieros forestales. Las capacitaciones tratan de compartir conocimientos que ya tienen algunos de los productores que conforman la cooperativa, y aportar un poco, lo que nosotros sabemos. Por ejemplo, hace algunas semanas, hicimos una capacitación de movimiento de suelo para la plantación de lechugas, solo una partecita ayude yo, el grueso de la capacitación lo dio el productor que nos recibió en su chacra”, afirmando que “esa es la idea, de todo esto, no venir a meter conocimientos extraños o de afuera, a la gente, sino que, los conocimientos que ya tiene algunos de los miembros, puedan ser compartidos entre los compañeros. Trabajarlo desde esta perspectiva. Elaborar educación popular y rescatar conocimientos populares” aclaró. Canchita de fútbolLa agrupación de colonos, vecinos y profesionales, comprometidos en trabajar solidariamente en conjunto para luchar por un futuro de igualdad de condiciones, no solo está en proceso de formalizarse como cooperativa, sino que también, mediante un programa de Nación gestionado por ellos, crearon tres merenderos para los niños de la zona. Además, están en proceso, mediante rifas y trabajos colectivos, de hacer una canchita de fútbol para los habitantes de la colonia.
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