Señora Directora: Parece que finalmente y después de muchos anuncios mentirosos, previo a elecciones generalmente, los ferries “Exequiel Ramos Mejía” y “Roque Sáenz Peña” serán recuperados y rescatados de una destrucción segura si continuaba esa criminal inacción. Al menos es lo que se observa de las primeras tareas realizadas con el propósito de reflotarlos, ya que tras muchos años abandonados se hallan semihundidos en la costa del Paraná frente a Nemesio Parma.Esas primeras tareas actuales con ese propósito espero signifiquen que, por fin, las autoridades han tomado conciencia de la importancia que encierran esas piezas tan importantes en la historia regional. Durante casi 80 años, entre 1913 y 1990, sirvieron para hermanar mediante el ferrocarril a Argentina y Paraguay.Mi temor –y ojala la realidad lo deseche totalmente– es que, como en ocasiones anteriores, todo se convierta en otra expresión electoralista con miras a obtener la adhesión de la ciudadanía en los comicios de octubre venidero. Al menos ese fue la fortuna de esas naves en los últimos diez años, ya que meses antes de cada elección se hacían grandes anuncios sobre un próximo rescate, para después de ella olvidarse de su existencia. Siempre quedaban arrumbados en la costa, cercanas al viejo puerto, primero, y trasladados a la zona de Nemesio Parma, después, desoyendo los reclamos, pero dejando al tiempo continuara destruyéndolos.
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