“Antes los presidentes nunca duraban”, dijo Morales en un acto celebrado en La Paz, donde se mostró sorprendido por el tiempo que lleva en el poder. El aniversario número once llega cuando los seguidores del mandatario no descartan la posibilidad de una nueva reelección, pese a que en febrero pasado la población rechazo esa opción en un referendo. Los colaboradores del jefe del estado exploran cuatro alternativas legales para lograr una reforma del artículo constitucional que por el momento prohíbe que Morales vuelva a postularse.Evo Morales asumió su primer mandato el 22 de enero de 2006, luego de imponerse en las elecciones generales de 2005 con el 54 por ciento de los votos, mientras ganó el referéndum revocatorio (2008) y dos reelecciones (2009 y 2014) con más del 60 por ciento de los sufragios.El Gobierno boliviano declaró en 2010 festivo el 22 de enero y lo llamó “Día del Estado Plurinacional”, para recordar que Morales asumió la Presidencia del país por primera vez en esa fecha de 2006. Evo comparó en su discurso ante el Parlamento los avances que tuvo Bolivia durante su administración con los progresos del país en distintas eras de sus 181 años de historia.En los mensajes emitidos cada 22 de enero, el gobernante suele presentar un amplio y detallado informe de gestión que, por ejemplo, en 2013 tomó cuatro horas, en 2014 casi cinco y el año pasado seis.Ante los legisladores, el Presidente afirmó que la recuperación y defensa de la soberanía política y económica es uno de los principales logros durante sus once años de gestión. En este sentido, valoró como esencial la nacionalización de los recursos naturales y de las empresas estratégicas, política que ha impulsado el desarrollo económico del país.“Anteriores gobiernos tenían un bajo porcentaje de legitimidad social producto de un sistema político excluyente derivado de la desigualdad económica y subordinación a intereses extranjeros”, analizó el mandatario durante el mensaje anual de rendición de cuentas a la Nación.“Desde 2006, el proceso de cambio ha garantizado la estabilidad política a partir de la inclusión de las mayorías nacionales en el ejercicio de la representación, así como la adopción de políticas públicas para la reducción de las desigualdades económicas y sociales”, contrastó.El gobernante sostuvo que “uno de los hechos fundamentales en la recuperación de la autonomía del Estado, fue la expulsión de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid), y de la agencia estadounidense de Administración para el Control de Drogas (DEA)”.Como consecuencia, desde 2013 Washington no asignado ni un dólar a las labores de combate al tráfico de estupefacientes en el marco de las responsabilidades compartidas. A juicio de Morales, “tales decisiones permitieron sentar soberanía en la lucha contra el narcotráfico, que era utilizada como pretexto para perseguir a las organizaciones sociales y dirigentes políticos”.Asimismo, señaló como un momento importante la expulsión del embajador de Estados Unidos, Philip Goldberg, en 2008 por conspirar contra la democracia, apoyar a la oposición y promover la división de Bolivia. “También eliminamos la base militar estadounidense de Chimoré, en el departamento de Cochabamba, la cual convertimos en un aeropuerto internacional”, apuntó.Morales insistió en la importancia de sentar soberanía política y económica, garantizar la dignidad nacional para el desarrollo del Estado Plurinacional, un debate sobre el cual, exhortó, debe seguir profundizándose. “Hemos cumplido con el mandato de Túpac Katari (líder indígena), cuando advirtió que regresaría y sería millones. Ahora somos millones con votos”, remarcó.Fuente: Télam y Prensa Latina
Discussion about this post