Dos “pesos pesados” del mundillo de la Triple Frontera. Así consideran los investigadores de la Policía Federal Argentina a los misioneros detenidos por su vinculación en la organización dedicada a contrabandear motos de alta gama. Tienen sus fundamentos: uno de ellos -no trascendió cual- fue extraditado a Estados Unidos en 2011, donde cumplió una condena por contrabando y estafa.Así lo pudo confirmar PRIMERA?EDICIÓN?mediante sus fuentes, más allá del hermetismo con el que se trabaja desde el Ministerio de Seguridad de la Nación, al frente de las pesquisas. No obstante aquello, el viernes trascendió el esquema utilizado por los detectives para entender el “rompecabezas” que permitía incorporar al mercado legal motocicletas Harley Davidson que eran traídas “en negro” desde Estados Unidos y China.?Muchas de ellas fueron ingresadas por Puerto?Iguazú, según se desprende del expediente que maneja la Justicia Federal.Es allí donde cobra relevancia el trabajo de “Coco” y “Malevo”, los dos ‘paseros’ misioneros apresados en Puerto Iguazú, quienes aparecen ligados directamente a otros contrabandistas, gestores del automotor e incluso a dos peritos de la Policía bonaerense que colaboraban en el registro “legal” de los rodados en Buenos Aires.Ese “blanqueo”, dice la causa, se llevaba a cabo en registros del automotor de San Fernando, San Martín, Quilmes, Campana y La Matanza, todos en Buenos Aires. Justamente del Registro Automotor 1 de San Fernando surge la denuncia, recién en 2013, que permitió ahora desbaratar a la banda.El rol de los misioneros era determinante. Las motos de alta gama ingresaban al país tanto por el puerto de Rosario como por la Triple Frontera. En este último caso, “Coco”?y “Malevo” entraban en acción mediante el ocultamiento de los vehículos en contenedores que eran declarados con otra mercadería, tal como electrónica, perfumes, indumentaria y hasta bicicletas. Por eso, en los dos allanamientos realizados esta semana en Iguazú, se incautaron numerosos elementos -sobre todo celulares- de contrabando.Esos procedimientos fueron parte de otros 44 realizados en la ciudad de Buenos Aires y en la provincia homónima, donde se incautaron 120 mil dólares, 1.560 euros, 26 motocicletas, documentos de titularidad de las mismas, sellos de mandatarios, documentos de identidad apócrifos, teléfonos celulares, computadoras, cuatro armas de fuego y municiones.La propia ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, aseguró que en la maniobra podrían estar involucrados personajes de la “farándula” argentina que habrían adquirido rodados a la banda, que después de ingresar las motos por Misiones culminaban el circuito al anotarlas en los mencionados registros con identidades de personas ya fallecidas.
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