Durante el fin de semana, el hospital de área de esta localidad sólo cuenta con guardia pediátrica pasiva. Esto quiere decir que el médico especialista de guardia no está en el hospital pero debe acudir sin demora cuando lo llamen desde el centro asistencial. Esta situación fue puesta en evidencia por el papá de un bebé de tres meses, Ricardo Giménez, quien acudió este jueves (feriado) al nosocomio para pedir consejo médico.“No llevé a mi hijito al hospital, sólo fui yo para consultar con un profesional. Pero la enfermera me dijo que volviera el lunes porque recién entonces estaría el pediatra. Le dije que yo le estaba dando té de malva con miel y me recomendó que siguiera con eso, que estaba bien. Cuando volví a mi casa, me sentía muy impotente porque nadie puede elegir cuándo se enfermará tu hijo y me parecía mal que durante cuatro días el hospital no contara con un pediatra; por lo que escribí en el facebook mi opinión. Eso leyó un médico conocido que se ofreció a atender a mi bebé, lo medicó y me advirtió sobre el peligro de darle miel antes de cumplir el año”, contó a PRIMERA EDICIÓN. Pocos especialistasLa falta de médicos especialistas en niños y la cada vez más difícil misión de contar con guardia pediátrica no son problemas exclusivos del hospital de Puerto Rico, sino de toda la provincia y el país. Según precisó el director del hospital de Puerto Rico, el obstetra Joel Cibils, “en la guardia tenemos un médico generalista que atiende a los pacientes; y en caso de considerarlo necesario, llama al pediatra. También el ginecólogo y el cirujano hacen guardia pasiva. En este caso, el papá sólo habló con una enfermera”. Más allá de este episodio en el que la vida del bebé de tres meses no estuvo en riesgo, Cibils admitió que es imposible contar con un servicio de guardia pediátrica activa. Según precisó, ese hospital cuenta con dos pediatras y una generalista que también atiende a niños, “en total, somos veinte médicos para una población de 80 mil pacientes, pues además de los vecinos de Puerto Rico, también atendemos a la población de Jardín América, El Alcázar y también vienen desde Montecarlo y Aristóbulo del Valle. En promedio, hacemos unas 300 consultas diarias en consultorio externo y entre 30 y 35 en guardia”.Ese nosocomio realiza unos 600 partos anuales y cuenta con tres toco-ginecólogos. “Nos hace falta fortalecer la atención con médicos obstetras y pediatras. Sin embargo, somos un hospital privilegiado por contar con tres médicos para atención de niños, dada la dificultad que hay para conseguir estos especialistas. Lo ideal sería que el Estado estimule el estudio de las especialidades de pediatría y obstetricia, que son cada vez menos elegidas. Hoy, somos los que más trabajamos y los que menos cobramos. Tenemos que lograr que los mejores promedios hagan estas especialidades, porque serán los encargados de recibir a los bebés y de atender la salud de los niños”, argumentó.
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