Abordar por primera vez aspectos de la sexualidad con un adolescente de entre doce y quince años es llegar tarde. Y, si bien es comprensible que la preocupación paterna se concentre en el debut en las relaciones, el contagio de enfermedades o embarazos no deseados, es un tema que debería formar parte de la educación que recibe el niño desde el nacimiento, puesto que se trata de un aprendizaje permanente, que supera con amplitud los límites de la mera genitalidad.Obviamente no para todos es sencillo, por eso PRIMERA EDICIÓN buscó el consejo de la licenciada en psicología Silvana Domínguez, especialista en niños y adolescentes, quien hizo hincapié en que debe hablarse de sexualidad integral, no solamente del acto sexual.Asimismo, refirió que para “abordar la sexualidad en la etapa adolescente hay que tener en cuenta que estamos frente a chicos que están atravesando muchos cambios, uno es la pérdida del cuerpo infantil, deben sobrellevar el no ser más nenes ni nenas y enfrentarse a un cuerpo pronto a ser adulto, es por ello que hay cuestiones que hay que explicar y tener cierto cuidado al momento de hablar”.Sobre todo porque “el adolescente tiende a centrare en sí mismo, intentando adaptarse a este nuevo cuerpo, que le produce sensaciones contradictorias, con gran repercusión psicológica”, sostuvo Domínguez.De allí la importancia de encarar la sexualidad en sus tres áreas, “física, psicológica y social”, recomendó la especialista.“La primera tiene que ver con los cambios más notorios, por los que el cuerpo ya está preparado para llevar a cabo el acto sexual. Lo psicológico se manifiesta en el conocimiento, la curiosidad, las intenciones, el pensamiento posicional. Mientras que en lo social va a tener que ver con involucrarse afectivamente con otras personas”, describió.Y añadió que siempre va a existir “vergüenza, básicamente porque están en una edad en que deben aprender a aceptarse con estos cambios y esto debe ser manejado con cuidado, pero debe hablarse, que no sea un tema tabú, porque si no tienen información o acompañamiento adulto, lo van a buscar en otro lado y puede ser peligroso”.A no dejar de lado “Los cuidados, los métodos anticonceptivos, el embarazo adolescente, sus consecuencias, a qué nos enfrentamos cuando el cuerpo de una chica físicamente está preparado para concebir pero psicológicamente aún no, el dejar de ser una niña para ser una mujer adulta” son algunos de los puntos en los que más debe ponerse énfasis, sobre todo en la adolescencia, recomendó la psicóloga.Además de consejos para hacer frente a “la falta de experiencia con el sexo opuesto, cómo manejar la timidez, las bromas groseras, porque la falta de información puede afectar una sana identidad sexual”, confió.“Como es una temática delicada hay que estar preparados para hablar y tener en cuenta que los adolescentes están atravesando cambios muy importantes”, finalizó la especialista.
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