La semana pasada productores hortícolas del departamento Lavalle (Corrientes) arrojaron sus tomates sobre la Ruta Provincial 27. La acción fue una manifestación para hacer conocer a la sociedad sobre la difícil situación que atraviesan en la actualidad, donde los acopiadores ofrecen no más de $1 por kilo de tomates, cuando en la góndola el precio que se paga 25.Nuevamente, la situación del mercado tomatero deriva en una crisis de precios para el productor. La caída de ventas en el sector consumidor, sumado al ingreso de fruta de países vecinos – denuncian entidades-, hizo que el precio cayera por el piso. Y los productores no llegan a cubrir los costos de producción.“Es una situación difícil para toda la economía regional; no nos olvidemos que la horticultura genera un movimiento económico de $2.000 millones por año, que vincula directa o indirectamente a todo el departamento Lavalle”, comentó al programa Aires de Campo el presidente de la Asociación Hortícola Río Santa Lucía, Pablo Blanco.Luego de la manifestación de la semana pasada –donde regalaron y arrojaron a la ruta más de 20 toneladas de tomates-, la situación de los productores no varió demasiado. En zona productora, la oferta más tentadora por la fruta apenas pasa el peso por kilogramo, cuando producir ese kilo al productor le cuesta $9.“No estamos ni cerca de cubrir los costos que tenemos de insumos, fertilizantes, mano de obra e infraestructura”, comentó Blanco. El dirigente explicó que “comparado con el año pasado, los fertilizantes aumentaron un 60%, en promedio; otro poco la mano de obra y también se incrementó el precio del plástico que usamos para los tendaleros”.El peso que reciben los productores en la chacra por un kilo de sus tomates de buena calidad se transforma en $10, $20 y hasta $40 por kilo en verdulerías y supermercados. “Se da un desfasaje de los precios impresionante.El mercado más importante de los horticultores correntinos se encuentra en grandes centros urbanos del país, como los mercados concentradores de La Plata, Buenos Aires, Rosario, Córdoba, y los de la región, como Corrientes, Resistencia y Posadas. Para graficar la situación de costos, Pablo Blanco explicó que la logística para llevar tomates al Mercado Central de Buenos Aires es de $3 por kilo.“Hoy hay una diferencia de precio entre lo que recibe el productor, que es quien hace la inversión y corre con todos los riesgos”, indicó.Según el registro de precios del Mercado de Concentración de Corrientes del pasado lunes, en playa libre el kilo de tomates redondos rondó los $4,70 de promedio. Y en puestos fijos de venta el producto se comercializó en $4,50. El precio casi se quintuplica entre la chacra y el mercado concentrador.El tomate correntino es uno de los más reconocidos del país, por su calidad, que deriva de la tecnología que aplican los productores en manejo y sanidad, sobre todo. De las 1.000 hectáreas plantadas en la zona productora, casi su totalidad se produce bajo cubierta, y en las últimas campañas se implementaron sistemas de control biológico de plagas, tanto en tomates como en pimientos.“Somos una de las zonas con mayor tecnología dentro de lo que es horticultura. Tenemos un control biológico de pimiento y tomate que es muy bueno. Estamos produciendo un producto que es totalmente amigable con el medio ambiente”, explicó Pablo Blanco.
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