Liliana Alvez de 30 años no se esperaba ser mamá de trillizos. Literalmente. Por las ecografías siempre esperó ser madre de gemelos. “Durante todo el embarazo los médicos me habían anticipado que eran dos bebés, pero a los 8 meses, en una ecografía de control ‘aparece’ el tercero. Entonces me derivaron para la cesárea urgente a Posadas”, contó a PRIMERA EDICIÓN la joven madre.
Los pequeños nacieron el 18 de julio último en el Hospital Materno Neonatal porque en los hospitales de Alem y Eldorado (hacia donde fue derivada en varias ocasiones desde su pueblo Bernardo de Irigoyen) no podía afrontar una cesárea múltiple.
Lo cierto es que más allá de las circunstancias y lo complejo que es afrontar los gastos para cuidar a los recién nacidos, los chicos se vinieron “con el pan debajo del brazo”, como dice el dicho popular, y el hecho de haberse convertido en los primeros trillizos nacidos en Bernardo de Irigoyen trajo mucha alegría a los vecinos, quienes le donaron ropitas, leche y pañales.
Desde este fin de semana, ya dados de alta, después de permanecer algunas semana internados en Neo, Liliana se puso a pensar en el futuro de su pequeña gran familia. Liliana ya tiene un hijo de 7 años con quien vive en casa de sus abuelos, porque éstos se hicieron cargo de ella desde que era una niña. Aunque no está en pareja, el padre de los trillizos aseguró que va proveer para los niños, pero es changarín golondrina y no está cerca de la joven ni de los bebés. Por ese motivo que Liliana, quien dejó de trabajar a causa del riesgoso embarazo, decidió apelar a la solidaridad.
“La casa de mis abuelos es pequeña y aunque ellos me abrieron el corazón, ya no puedo quedarme porque ahora somos cinco”, relató a este Diario. “Tengo la esperanza de poder darles un techo donde estar cómodos y crezcan saludablemente. Ojalá mis bebés estén iluminados por una buena estrella y tengamos esa feliz noticia de tener nuestra propia casita”, deseó la chica.
Son días de extremo cuidado para ella y los chiquitos porque todavía siguen con bajo peso ( 2 kilos) y debe hacerles un control cada semana, como mínimo hasta que se cumpla la etapa de desarrollo que no pudieron cursar dentro del vientre materno. Liliana estima que realizará esos controles y cuidados extremos por los menos hasta que cumplan los 6 meses de vida. Los controles debe realizarse en el Eldorado porque en Irigoyen no hay especialistas.
“Voy a intentar cumplir con ese control, porque tengo que pagarme el pasaje cada semana, por lo menos por los próximos dos o tres meses. Por ahora me están ayudando mi abuela y mi hermana”, confió.
La chica se está recuperando de la cirugía de la cesárea y por ese motivo tampoco pudo tramitar en ANSeS las AUH para los tres. “Gracias a Dios mi operación está evolucionando bien. Yo estoy bien y ellos también”, aseguró. La chica autorizó la publicación de su número para quienes deseen colaborar con ella.
Nunca de a tres
Cuando los vecinos se enteraron de la llegada de los tres niños (una beba y dos varones) se sorprendieron ya que hasta ahora no había registro de que hayan nacido trillizos. Para todos es motivo de alegría.