Puede resultar polémico pero, en un contexto de país donde la presión fiscal y el desmedido gasto del Estado sigue generando problemas, el caso del municipio de Santa Catalina Holmberg en Córdoba trascendió las fronteras de la provincia mediterránea.
El intendente, los concejales y los tribunos de Cuentas comunales no cobran sueldo por su desempeño público. Y el jefe comunal, Miguel Negro (Unión por Córdoba) acaba de conseguir hace una semana una nueva reelección para completar cuatro décadas al frente del municipio. Aunque prometió que, ya jubilado, será la última “para dar paso a los jóvenes”.
Santa Catalina Holmberg aplica, además, uno de los impuestos más bajos del territorio provincial. El pueblo tiene casi cuatro mil habitantes y está ubicado a pocos kilómetros de Río Cuarto.
Ahorrar para obras públicas
En diálogo con el programa “Primera Plana” que se emite por la 89.3 FM Santa María de las Misiones, el intendente Negro explicó que el trabajo ad honorem de los funcionarios municipales les permite ahorrar más de 200 mil pesos mensuales.
“Cuando yo era concejal en el 73, en esa fecha ni los concejales ni los tribunos de Cuentas cobraban. Cuando yo fui intendente en 1983 seguimos con el mismo sistema. Y ya me jubilé hace tres años entonces trabajamos todos ad honorem en el pueblo. Los concejales y tribunales de Cuentas son empleados en otros trabajos. Se reúnen dos veces por mes a la noche”, explicó el jefe comunal.
“Logramos ahorrar 230 mil pesos por mes y más de un millón al año que va destinado a obras públicas”, confirmó. A su vez, reveló que “el Impuesto Inmobiliario lo cobramos una vez al año. Si usted tiene una propiedad de 10 metros de frente paga 150 pesos al año. Un auto nuevo paga de patente tres mil pesos pero hay usados que pagan 100 por mes”, para graficar el valor de los tributos que cobran.
Lamentó que desde la Nación no reciben fondos para obras. “No hemos recibido nada de los dos gobiernos que pasaron. Ni un peso a pesar de presentar diez proyectos. Hay una obra grande que espera desde 1972 para lograr la doble mano a Río Cuarto que hasta Macri nos prometió”, dijo.
Tienen hasta un hotel municipal
En Santa Catalina Holmberg viven de la agricultura y la ganadería y tienen dos escuadrones de Gendarmería y el Batallón 604.
“Tenemos una zona rural muy grande. Vivimos del campo y de la coparticipación que nos manda la Provincia que movemos mucho”, graficó el intendente Miguel Negro en declaraciones a la radio de PRIMERA EDICIÓN.
A partir de los ahorros y los recursos que consiguen de la Gobernación, lograron que Santa Catalina Holmberg tenga “un 99% de agua y de luz, un 97% de cloacas y de gas; y 87% de asfalto de hormigón en todo el pueblo”, reveló el intendente Negro.
“Tenemos un hotel que administramos desde la Municipalidad, además de un Parque Industrial hecho por el municipio que tiene 21 hectáreas”, aseguró el alcalde.
Buscando sucesor joven
El jefe comunal llegó al poder en 1983 con el retorno de la democracia. Desde entonces, se presentó a varias reelecciones y ganó con el voto de los vecinos sin proponer una alternancia en el manejo de la cosa pública. Pero Miguel Negro anunció que este será su último período al frente de la administración comunal.
“Ya me voy con 78 años y trabajo desde los 14. Quiero descansar un poco. No hay sucesor y hay muchos muchachos jóvenes que están trabajando conmigo y les dije que se arreglen entre todos que, el que elijan, yo lo voy a apoyar. Pero sin interferir”.