Además de las medidas dispuestas para controlar las vías de contagio, los responsables de la Zona Sanitaria con sede en la ciudad de Esquel resolvieron convocar de urgencia a todos los psicólogos de la comarca debido a la conmoción que se registra en la población.
El director del Área Programática Esquel, Jorge Elías, reconoció que “la situación desde hace días es extremadamente compleja” en la localidad del norte chubutense, de donde son oriundas las doce personas que contrajeron hantavirus desde comienzos de noviembre, entre ellos los cinco fallecidos.
En Epuyén viven unas 4.000 personas y la seguidilla de casos positivos de hantavirus alteró por completo la vida del pueblo. Uno de los muertos era empleado municipal y una mujer que también falleció trabajaba en el hospital local.
En tanto, una mujer de 30 años se convirtió en la quinta víctima fatal de hantavirus en esa localidad chubutense. El deceso de la mujer se produjo en el hospital de Esquel donde se encontraba internada en el área de terapia intensiva.
El Ministerio de Salud Chubutense informó que este domingo “a las 20 se produjo el deceso de la mujer y ya son cinco las personas muertas por este brote que se presume que comenzó en un evento festivo en Epuyén”.
La contingencia epidemiológica se originó el 3 de diciembre último cuando se confirmaron doce casos de hantavirus y si bien fueron descartados seis, una persona aún está bajo sospecha de estar afectada por el virus de hanta.
El Hantavirus es un género que agrupa varios virus, que son transmitidos por roedores infectados y en humanos generalmente producen dos tipos de afecciones: un tipo de fiebre hemorrágica viral, la fiebre hemorrágica con síndrome renal; o el síndrome pulmonar por hantavirus, una afección pulmonar muy grave.
Fuente: Agencia de Noticias NA