El Gobierno de Mauricio Macri prometió construir 3.000 Espacios de Primera Infancia (EPI) en todo el país durante los cuatro años de su Gobierno. Más allá de que no lleva cumplido ni el 10% en la actualidad, hay un aspecto preocupante y es que estas obras prácticamente no ocupan mano de obra ni productos de las provincias donde se construyen.
En el caso de Misiones, donde la construcción está muy ligada a los ladrillos, la madera y el hormigón con fuerte participación de obreros, la aparición de este tipo de obras queda totalmente desencajada y fuera de contexto ya que utilizan muy poca mano de obra, no usan ladrillos ni madera y tampoco se compra productos a proveedores locales. En definitiva, no tienen nada que ver con el contexto económico y cultural de la provincia.
Se puede observar en las fotos obtenidas por PRIMERA EDICIÓN y las recorridas realizadas por este Diario, con la opinión de un ingeniero misionero, que en los EPI se destaca el uso de tecnología de construcción en seco (steel framing), perfilería galvanizada, placas superboar y se usan tableros OCF que son importados de Brasil.
Genera una decepción porque son obras grandes, imponentes, donde no hay un solo ladrillo, no hay nada de madera y muy poco personal para la construcción. Lastimosamente, detrás de cada albañil sin trabajo hay una familia”, reflexionó el profesional.
“Pero además los accesorios de obra, tornillería, vidrios, chapas con poliuretano de alta densidad, todo viene de Buenos Aires, ni siquiera los proveedores locales están trabajando con su perfilería de aluminio, su vidrio o su chapa”, se quejó el ingeniero.
“Lo que se ve es una importación prácticamente al cien por cien de todos los materiales, todo eso se traslada 1.200 kilómetros, como si acá no hubiera ningún proveedor”, lamentó.
Por otra parte, explicó que “la mano de obra también es afectada en Misiones, el recurso humano, porque no hay cultura de trabajo de construcción en seco naturalizada en la provincia. Entonces, también ahí se ven afectadas las familias y la mano de obra más tradicional porque con el uso de esta tecnología se trabaja totalmente de otra manera”.
“Esta tecnología constructiva no tienen nada que ver con nuestro contexto económico y cultural, muy pocas empresas y pocos trabajadores conocen este mecanismo”, dijo el ingeniero.
Ventaja y desventaja
Superboard es una placa plana, mezcla de cemento, fibra celulosa, sílice, agua y agregados naturales, fabricada mediante un proceso de autoclave (alta presión, temperatura y humedad) que le brinda una gran estabilidad dimensional y alta resistencia.
Es un sistema de construcción formado por un entramado de perfiles obtenidos por el conformado de chapas laminadas en frío de acero galvanizadas.
Steel Framing significa bastidor o cuadro (en inglés frame) de acero (en inglés steel) debido a la utilización de los perfiles galvanizados armados en forma de cuadrados de entre 2 y 4 metros de lado, los cuales pueden ser prearmados en el suelo y luego colocados verticalmente o incluso también pueden ser armados en un taller y ser transportados a la obra en construcción mediante un transporte adecuado.
Los perfiles del sistema son fabricados a partir de chapas de acero galvanizadas de espesores reducidos por conformado en frío.
El Steel Framing provee una gran flexibilidad de diseño, mayores luces que las soluciones en madera y mucho menores pesos propios que las soluciones en hormigón armado. Es una solución que puede reducir costos y tiempo de obra.
La rapidez de terminación permite un rápido retorno del capital, convirtiéndose en el sistema más atractivo para los inversores.
Son algunas de las ventajas de este novedoso sistema de obra que trae la Nación a la provincia, pero la gran desventaja es que los obreros de la construcción no tienen trabajo, los aserraderos no aportan madera para encofrado y tampoco se benefician proveedores de ladrillos, cemento y otros materiales de construcción.