La sequía, el salto del tipo de cambio, tasas de interés elevadas y una mayor incertidumbre frenaron las decisiones de adquirir maquinaria por parte de productores y contratistas agrícolas durante los últimos meses; y ello se vio reflejado en los datos que arrojó el sector durante el segundo trimestre del año.
La venta de maquinaria agrícola cayó 27 % interanual medido en unidades o un 38% en dólares, considerando los rubros cosechadoras, sembradoras, tractores e implementos.
Según datos publicados por la Bolsa de Cereales de Córdoba en base a la información difundida por el Indec para este segundo trimestre, el rubro más afectado fue el de cosechadoras con una caída del 52% en las unidades comercializadas, seguido por tractores, implementos y sembradoras con bajas del 28, 24% y 20% respectivamente. Estos porcentajes también se explican por el gran desempeño que mostraron las ventas durante 2017.
La contracción en las ventas en sembradoras fue menor al resto y es el rubro que se encuentra más alejado del promedio de unidades vendidas los últimos años. Por su parte, la caída en el rubro cosechadoras y sembradoras está relacionada con la situación de los contratistas agrícolas, que ajustaron tarifas por debajo de la inflación debido a los menores rendimientos y mayor competencia por la pérdida de área cosechable derivados de la sequía. A ello se le sumó un aumento en los costos del gasoil y en el valor de reposición de los equipos tras la devaluación del mes de mayo.
Considerando los primeros seis meses del año la caída en las unidades vendidas y en la facturación fue del 21% y 30 % respectivamente, donde la contracción en el rubro cosechadoras, sembradoras y tractores promedió el 23%. Puede que a futuro las ventas se reactiven para el segmento de productores, ya que el valor en dólares de los distintos equipamientos disminuyó, siendo necesario destinar una menor cantidad de productos para poder adquirirlos.